Entrevista. Los días 26, 27 y 28 de mayo de 2016 Raquel Logendio debutó con la Berliner Philharmoniker dirigida por el Maestro Juanjo Mena cantando El Sombrero de Tres Picos de Manuel de Falla, una obra que Lojendio conoce bien. De esto y de algunas cosas más hemos hablado con Raquel entre conciertos y óperas.

 

1. Ruth Prieto: Los días 26, 27 y 28 de mayo de 2016 acaba de cantar usted con la Berliner Philharmoniker dirigida por el Maestro Juanjo Mena El Sombrero de Tres Picos de Manuel de Falla, ¿qué puede comentarnos de este concierto?

Raquel Lojendio: Una de las experiencias más intensas de mi carrera. Tener la oportunidad de cantar tres veces en tres conciertos con ellos ha sido como un regalo. Y que el Maestro Mena confiara en mí, una gran satisfacción también. Desde luego algo que nunca olvidaré.

2. R.P.: ¿Qué impresión le produjo ver a los ilustres instrumentistas acompañarla con palmas y oles?

Raquel Lojendio: Al principio les costó un poco de hecho entre risas y dudas me preguntaban por la correcta acentuación de los “olés” o la mejor manera de colocación de las manos para las palmas. 

3. R.P.: ¿Cómo ha sido su experiencia en Berlín?

Raquel Lojendio: Me llevo una buenísima experiencia. En la Berliner además todo funciona dentro y fuera del escenario, la atención que recibí tanto de músicos, como del personal de la Philarmonie fue siempre exquisita. Estoy muy contenta la verdad.

4. R.P.: ¿Qué nos puede comentar de esta obra: El Sombrero de Tres Picos?

Raquel Lojendio: Es una obra conocida por mí ya que además la he grabado con Mena y la BBC Philharmonic. Le tengo especial cariño por todo lo bueno que me ha traído. Las intervenciones son cortas pero no por ello deben estar exentas de todo el carácter gitano con que Falla, como bien escribe en la partitura, buscaba, o de su correcta entonación y emotividad.

5. R.P.: ¿El reportorio español es suficientemente conocido, a nivel internacional?

Raquel Lojendio: Pues en mi opinión, no todo lo que debiera, de hecho creo que si Falla hubiera sido francés o alemán estaría mucho más valorado e interpretado de lo que está ahora. No solo El sombrero de tres picos, también La Vida Breve, sus canciones, El Amor Brujo.... Falla era un auténtico genio de la creación musical.

6. R.P.: ¿Quién es Raquel Lojendio?

Raquel Lojendio: Soy una mujer que persigue la belleza y la perfección, por lo que eso me lleva a ser bastante inconformista, soñadora y un poco “en el aire”. Soy también madre y esposa, así que tengo una vida completa de actividad.

7. R.P.: ¿Qué le queda de la niña que comenzó sus estudios musicales en Santa Cruz de Tenerife?

Raquel Lojendio: De esa niña la verdad es que me queda casi todo. Las ganas siempre de aprender, mi interés por la opinión de los grandes y mi admiración hacia ellos. La sensación de estar siempre en la búsqueda, la emoción siempre de cantar con nervios pero con infinita alegría y esa sensación de “me dejo llevar y disfruto y ya veremos que nos trae la vida “

8. R.P.: ¿Qué característica la define mejor a usted como cantante?

Raquel Lojendio: Quizás eso debería contestarlo los entendidos que me ven desde fuera, pero lo que me gustaría que se apreciase de mí es justamente lo que yo aprecio en otros admirados músicos: la técnica, la expresividad y la versatilidad

9. R.P.: ¿Qué le inspira artísticamente hablando?
  
Raquel Lojendio: Me inspira la belleza, la sensación casi de caída libre donde el tiempo parece desaparecer, donde sientes una conexión invisible pero latente con el público, la enriquecedora sensación de transmitir emociones.

10. R.P.: ¿Cuáles son sus próximos proyectos? 
 
Raquel Lojendio: Me encuentro en un momento de mi carrera deseado, en el que por fin puedo combinar sinfónico y ópera. Será una temporada de debuts: en Julio debutaré con la Boston Symphony también con El Sombrero de tres picos, vuelvo a cantar Traviata - rol que me enloquece-, debutaré también en Micaela de Carmen y Marguerite de Faust. Así mismo será también mi debut en el Teatro de la Zarzuela con Las Golondrinas. En resumen…Todo el día estudiando pero muy muy feliz.