Entrevista. Ayer no solo se canceló su estreno sino todas las funciones de «Policías y ladrones» de Tomás Marco en el Teatro de la Zarzuela. Hemos hablado con él de su obra, de la situación del Teatro de la Zarzuela y de la panorámica de la cultura en España. Esto es lo que nos ha contado.

 

1. Ruth Prieto: Hoy se acaba de cancelar el estreno de «Policías y ladrones» su última obra que se podrá -esperemos- escuchar estos próximos días. Antes de nada, ¿qué le parece a usted todo lo que está pasando con el Teatro de La Zarzuela?

Tomás Marco: Me parece un verdadero disparate. Y no porque unir Zarzuela y Real sea bueno o malo, sino porque hay que empezar por saber qué se quiere hacer, precisar muchas cosas, hablar con mucha gente, negociar y dejar todo claro antes de lanzar por que sí un decreto bomba en mitad de temporada sin explicar nada. Tenemos unos políticos verdaderamente impresentables. Es cierto que la manera administrativa de trabajar en la Zarzuela es manifiestamente mejorable pero eso no se arregla con convertirla en la sala B del Real.

2. R.P.: ¿Vamos a poder escuchar la obra el día 7 de abril?

Tomás Marco: La huelga se plantea para TODAS las representaciones. Desgraciadamente servirá sólo para cargarse un estreno español. Para tener éxito como medio de presión tendría que haber anulado todas las representaciones de todas las unidades del Inaem que sólo se unen en alguna representación puntual.
No creo que se vuelva a montar, no es algo que sea importante para nadie aunque todo el mundo se llene la boca diciendo que todo se hace para bien de la música española. Hay vaporosas promesas a largo plazo pero prometer es fácil y encontrar luego razones para no poder/querer cumplir las promesas es todavía más fácil
 
3. R.P.: Muchas personas, en mi opinión injustamente, tienen ubicada a la zarzuela como género menor. ¿Qué representa la Zarzuela como género y como patrimonio artístico?
 
Tomás Marco: Como patrimonio es de gran importancia pues fue lo único que se permitió hacer a los compositores españoles durante un siglo y produjo algunas obras maestras. Pero se ha convertido en una cosa museística porque no hay teatros que la hagan ni se ha fomentado que se creen cosas más actuales sino que se vuelve una y otra vez sobre una docena de obras con casi un siglo de existencia.
 
4. R.P.: La obra que ¿es su último trabajo por el momento?: «Policías y ladrones», es una zarzuela contemporánea, ¿qué tiene de zarzuela y qué tiene de contemporánea? 

Tomás Marco: La obra es de 2015, no es mi última obra. Ha costado tres años estrenarla pese a ser un encargo del teatro. Y me parece que ahora, si hay suerte, habrá que llegar a mi Centenario. De zarzuela tiene todo. Partes habladas y partes con música, estructura por números, argumento de actualidad, intención crítica. Aunque históricamente hubo zarzuelones rurales, regionales o lacrimógenos, sus mejores obras fueron siempre contemporáneas de su momento, de la actualidad , a la que se abordaba con sentido del humor, como lo hace ésta. Musicalmente es mi música de siempre adaptada al género.
 
5. R.P.: ¿Cómo ha sido el trabajo con el libretista y el resto del equipo de trabajo? 

Tomás Marco: Con Álvaro del Amo, el libretista, trabajamos conjuntamente la primavera y el verano del 15 aportando ambos ideas a la música y al texto, como se hizo siempre. Queríamos que fuera muy dinámica y pasaran muchas cosas. Luego cerré la partitura en el otoño porque estaba encargada y prevista para estrenarse en Noviembre de 2016.
La directora de escena, Carme Portaceli ha hecho una labor profesional extraordinaria, muy moderna y lúcida, sin extravagancias caprichosas, y subrayado siempre lo que dicen letra y música.
El director musical, José Ramón Encinar ha trabajado la obra de manera asombrosa, dirigiendo cada ensayo individual de los cantantes nota a nota, conociéndose la partitura a fondo y haciendo un trabajo excepcional.
Y contaba con algunos cantantes fuera de serie que además daban el tipo de cada personaje. Manuel Lanza está soberbio y María Hinojosa hizo suyo su personaje agrandándolo cada día. La pareja de jóvenes, Rocío Pérez y Pablo García López, es también magnífica.
 
6. R.P.: Musicalmente ¿cómo ha sido su proceso creativo?, ¿qué nos vamos a encontrar?

Tomás Marco: Con un tratamiento vocal que es un desarrollo de todo lo que ya había puesto en las óperas anteriores, un coro muy importante,y una orquesta compleja y variada al servicio de la acción y de las voces
 
7. R.P.: ¿Cómo ve la panorámica en España de la música y la cultura?

Tomás Marco: Pues sinceramente, cada vez peor, con menos medios y todo más plano, más cutre. Y más mediocre. Con unos político execrables, sin que se salven los de ningún partido, y un desinterés por la cultura que ya es casi una cruzada contra ella. Y las instituciones en pleno declive.
 
8. R.P.: Muchas veces se estrenan obras contemporáneas y no se vuelven nunca más a programar, ¿qué le parece esa “política cultural" de encarga obras y no apoyar la programación de compositores que algunas instituciones tienen?

Tomás Marco: Me parece muy mal. Pero incluso esa política ya casi no existe. Los encargos cada vez se dan menos, peor pagados. Y no se programa prácticamente nada. El compositor siempre era el último mono pero ahora es el mono que va después del último.
 
9. R.P.: Cuando hablamos de música contemporánea se mete en el mismo saco estéticas muy diferentes que van desde el siglo XX al XXI, ¿cómo definiría su estilo, sus señas de identidad?

Tomás Marco: El que las estéticas sean diferentes no es malo. Lo que es bueno o malo al final es la obra y ninguna técnica ni ninguna estética garantizan que la composición valga o no. Las dictaduras estéticas y técnicas se han acabado, aunque algunos no se hayan enterado. En cuanto a mi propio estilo lo tendrán que definir otros, a mi sólo me corresponde averiguar qué quiero hacer en cada momento y cómo, no juzgarlo.
 

Las fotos del Maestro Marco son de Ignacio Evangelista, cortesía del compositor.