ISSN 2605-2318

Artistas

Claudia Montero (Compositora) 

Claudia Montero, In memoriam


18/01/2021

«La música está en mi cabeza mucho antes de ser escrita, entonces solo tengo que dejarla salir en el momento preciso»


 
Claudia Montero López

1962 - 2021



Figura emblemática de la música de nuestros días, Claudia Montero hizo historia al recibir el doble Latin GRAMMY en el año 2018, que junto a los premios recibidos en los años 2014 y 2016 la hicieron merecedora de 4 galardones, algo inédito hasta ahora en la música clásica. Su música expresiva, su legado, su mirada a la música argentina, sus obras, su enorme simpatía y humanidad quedarán por siempre en nuestra memoria y en nuestros corazones.
En recuerdo de una compositora inquieta, activa, puro optimismo, pura bondad, cuya música han tocado algunos de los mejores intérpretes del panorama actual, un ser humano excepcional, muy querida por sus amigos y por una legión de fans que la seguían a todas partes, algunos de sus amigos más cercanos, algunos de sus intérpretes, compositores y periodistas han querido enviar su testimonio como recuerdo y homenaje.
Todas las personas que formamos El Compositor Habla nos unimos en las condolencias a la familia por la pérdida de Claudia y deseamos acompañarles en estos difíciles momentos con nuestro recuerdo. Descanse en paz.



Ana María Archiles. Claudia era mi amiga, me siento afortunada por ello. Siempre fuerte, alegre, positiva, ayudando a todo el mundo con su chispa. La conocí por Facebook y desde el primer momento vi que era todo corazón. Al principio me daba hasta apuro hablar con ella, toda una compositora con dos Latin GRAMMYs en ese momento y su música, en especial la de guitarra. Le pedí permiso para tocar sus obras y ese fue el principio de nuestra conexión con comentarios tan bonitos que me guardaré siempre para mí como un regalo. Por fin un día pudimos cuadrar y me fui a recogerla a la estación de trenes de Castellón, ella no lo sabe pero Dios mío qué nerviosa estaba. Ella bajó del tren y con toda normalidad me saludó y nos fuimos al teatro Principal, le esperaba una bonita entrevista con Patricia Mir y me permitió tocar sus Lágrimas de Buenos Aires. China, Italia, España, guitarra sola, flauta y guitarra, poesía y guitarra, no pararé de interpretar su música jamás porque así será como la seguiré teniendo cerca, con su luna mágica a la que a partir de ahora miraré siempre acordándome de ella. Gracias Claudia por tu energía, por tu ayuda, por saber querer a los que te hemos querido tanto, porque las lágrimas que derramamos por tí jamás serán suficientes para demostrarte lo que te queríamos. Como me dijiste hace poco, “el cielo se te abre Ana, disfrútalo”.

Xoan M. Carreira. Mundoclásico. Claudia Montero: una artista entre las dos orillas. El Mediterráneo se identifica con la luz, el optimismo y el hedonismo, y esta es la imagen que tengo de tres creadores tan mediterrános como Chapí, Toldrá y Montsalvatge, a los que a menudo imagino como tres cosmopolitas sentados a la orilla de un mar que jamás separa, siempre une. Esta imagen marítima es muy parecida a la que tengo de Claudia Montero mirando al mar, sea desde Buenos Aires, sea desde Valencia, donde encontró su segundo hogar a los 40 años, aún con enormes ganas de aprender a hacerse preguntas sobre el qué, tras haber aprendido con enorme competencia el cómo en su Buenos Aires natal. Al igual que Chapí, Montero entendió que para triunfar en todo el mundo es imprescindible crear desde tu propio territorio topográfico, cultural y espiritual, que es lo que permite el perfecto equilibrio entre el cómo estilístico, y el qué de la sensibilidad íntima y la propia identidad. A la vista está que alcanzó el éxito, iluminado por los poderosos focos de sus cuatro Grammys y por el recorrido de su música por salas de todo Occidente en la interpretación de relevantes intérpretes. Su último hito fue conseguir ser profeta en su tierra de adopción luchando con los hándicaps de ser mujer, latinoamericana y crear pensando en el público y en los intérpretes. No tuve la fortuna de conocerla personalmente y sólo nos encontramos en la distancia a través de las redes y la mensajería electrónica, que me permitieron encandilarme con su optimismo, bonhomía, sentido del humor y joie de vivre. Adiós a una mujer artista que ha sabido ser feliz entre las dos orillas, del mar y de la vida.

Isabel Costes. Querida Claudia, nos conocimos a través de tu música. Ocurrió en 2018 cuando propuse incluir una obra tuya en el programa del concierto que iba a dirigir como invitada con la Orquesta Filarmónica de Montevideo en marzo de 2019. Te llamé, te conté y me propusiste programar tu magnífico Preludio sinfónico: Un relato sobre Camila, concretamente una revisión que realizaste para ese concierto. Me conmovió tu cercanía, tu generosidad, tu entusiasmo… y poco después cuando recibí la partitura me impactó la claridad con la que mostrabas los diferentes episodios de la historia, la oportuna utilización de tonalidades sombrías, el excelente manejo de la orquestación y la riqueza melódica para narrar, en forma de música, una historia trágica y real: la de Camila O’Gorman. Ahí empezamos a conversar, a compartir experiencias, música… y yo me sentí afortunada de tener al alcance de la mano el testimonio inmediato de tan insigne creadora. Habitaste en este mundo entre la generosidad y la excelencia. Viajaste inesperadamente y demasiado pronto al lugar donde reinan las estrellas. Quiero pensar que te necesitaban allá donde habitan solo los GRANDES. …. Cierto, nos quedaron cosas por materializar, pero sé que algún día, en algún lugar, en algún tiempo, nos encontraremos. Hasta siempre querida y admirada Claudia.

María de Alvear. Mi más sentido pésame a su familia y seres queridos. Tristeza total por su pérdida, necesitamos compositoras como ella.





José Domenech. Quisiera contar cuánto hemos vivido juntos en más de 15 años de relación profesional y de amistad, de cuántos logros, ideas compartidas, retos superados, proyectos planeados, pero hoy solo puedo hablar de mi amiga y de cuánto la voy a extrañar. Era difícil destacar por encima de sus logros profesionales, estrenos, Grammys, pero lo hacía. Y lo hacía de la manera más natural, siendo auténtica, cariñosa, amiga de sus amigos. Subimos juntos, casi a diario durante 4 años, al tren de Valencia a Castellón cuando yo era un estudiante, y reíamos y contábamos mil historias. Quince años después subimos a la limusina en Las Vegas para ir a la rueda de prensa y seguíamos riendo y contando las mismas historias, el tiempo no había pasado. Esperábamos cualquier momento libre para salir a tomar un poco de aire y hablar de cosas que nos interesaban. Primero en las clases, después en reuniones, cenas, comités, cualquier sitio era bueno para esto. Hemos compartido tantas cosas, aún estando lejos, que no consigo visualizar aun no poder mandarle un WhatsApp o llamarle y hablar de cuando volvíamos a juntarnos para la próxima idea o cuando salir a cenar por El Carmen. Te vamos a extrañar muchísimo. Seguirás presente siempre en nuestro recuerdo.

Foro Argentino de Compositoras debe escribir  acerca de una noticia de la que nunca hubiera querido  -Así como la Comtessa de Día, Trobairitz - Mujer Trovadora  decía..."Ahora Debo Cantar de lo que No Querría". El  16 de enero de 2021, ha partido de este mundo y muy temprano, nuestra querida colega, mujer compositora argentina , residente en Valencia España, Claudia Montero. Claudia era amiga nuestra, compartió un tiempo breve con nosotras en el Foro, incluso pudo estar en reunión en casa de Irma Urteaga  y se estrenó obra suya para  nuestro Ciclo de Conciertos en Buenos Aires en Septiembre de 2009.
Excelente artista, talentosa, exitosa, con premios, obras y todo lo que se esperaba en su haber.  Nos ha dejado muy temprano. Su Música seguirá vibrando, y con ella seguirá estando presente. La gracia del legado de los artistas que trasciende más allá de su tiempo. Hasta el próximo concierto Claudia Montero. Abrazos de Música
Nelly Beatriz Gómez – Presidente del Foro Argentino de Compositoras
Eva Irene Lopszyc- Vicepresidente del Foro Argentino de Compositoras.
 
 
Natalia González Figueroa. Luego de un Concierto en Valencia hace ya varios años para Musikeon, donde como siempre, yo presentaba música de compositores argentinos, tuve el gusto enorme de conocer a Claudia quien vino a presentarse y felicitarme. Desde entonces quedamos conectadas, compartimos trabajo musical y hermosas charlas. Me siento enormemente afortunada de haber puesto mis manos a su talento, de disfrutar una persona tan sincera, generosa y cálida. Los días de estreno en que tocaba su música amanecía con un hermoso mensaje suyo, siempre. Claudia estará eternamente y su legado es enorme. Una gran mujer y gran compositora argentina, orgullo para nuestro país.

Federico Jusid. Con Claudia nos vinculaba una relación afectuosa y de mutuo respeto por nuestros trabajos. Hasta el momento, la comunicación era virtual. Pasé mucho tiempo en EEUU, así que siempre manteníamos la promesa de tomar “ese cafecito”, presentar a nuestras familias, finalmente, conocernos en persona cuando yo estuviese por Valencia. Gracias a las redes yo fui descubriendo su obra, y ella mis últimos proyectos. Siempre tenía palabras de apoyo y me transmitía una energía maravillosa. Y yo celebraba mucho sus logros y éxitos. Además del amor a la música, compartíamos la “Argentinidad”. Ambos desde un exilio voluntario. Imagino -ahora no me queda más que eso- que hubiésemos hablado largo sobre esa condición. La vida siempre toma rumbo propio, más allá de todo lo que nosotros planeamos y proyectamos. La pandemia me mantuvo todo el año fuera del pais. Y ese cafecito, nunca pudo llegar. Espero que allí donde esté, siga haciendo música, rodeada de la fantástica energía que siempre desprendía.

Eva Irene Lopszyc. La amistad con Claudia, llevaba su buen tiempo de años compartidos, desde las cosas cotidianas hasta la música y su decir. La oportunidad de los mensajes por internet – cuando ella se encontraba en España- , de los cafés disfrutados aquí en Buenos Aires, de los almuerzos en Valencia misma. Hemos trabajado juntas- me recuerdo- con la visión puesta en los poemas de Alfonsina Storni, luego con la obra literaria de Rubén Rodríguez Lucas para Valencia. Más adelante por 2009, Claudia integró por un tiempo breve, el Foro Argentino de Compositoras y allí coincidimos con obra también, especialmente solicitada para ella, estrenada aquí, en nuestros conciertos. Comentábamos la cotidianeidad por los medios que se podía. Recuerdo en  2018 y 2019, nuestras charlas en la misma Valencia, siempre lindas, claras y objetivas. Recuerdo su alegría al recibir los Premios Grammy, su felicidad por los logros de sus hijos. Claudia compartía su tarea con el hacer de sus hijos. Era una madre con todas las letras. Y lo sigue siendo a través de ellos. Hemos compartido conciertos de sus obras de una manera original, cuando eran en Buenos Aires, y ella no podía estar presente- la distancia y sus actividades no lo permitían- yo iba y le iba contando y enviando fotos y pequeños videos mientras se iban desarrollando, entonces ella estaba en contacto con el concierto al mismo tiempo. Recuerdo cuando el Concierto de la Camerata de Mujeres en Buenos Aires, dirigida por su querida amiga Lucia Zicos, su obra estaba allí, y mi hermana y yo estábamos en platea en butacas detrás de Mercedes, hermana de Claudia. Filmé los aplausos de su hermana, comprendiendo los aplausos de las hermanas por mi propia experiencia. En este año de 2020, poco antes que estos tiempos de pandemia comiencen, me decía: “Eva, tenés que venirte a quedar por un tiempo a Valencia. ¿Te imaginás?”…
En 2019, compartí un evento en Bahía Blanca junto a Lucía Zicos, su amiga y directora de sus obras. Allí dijimos, cuando Claudia venga a Buenos Aires, nos prometemos una cena junta las tres, con Pizza y cerveza. Nos ha quedado en promesa, no lo pudimos realizar. El año pandémico fue complejo, pero no por ello dejamos de estar en contacto, es más, recuerdo lo feliz que estaba preparándose y probándose vestidos  para la cita de rueda de prensa por su “Compositora Residencia en la Orquesta de Valencia”. La noticia me sorprendió en la mañana del sábado 16 de enero de 2021. De pronto algo que era presente, pasa a  un pasado irrepetible. Me parece de ficción que esté escribiendo ahora  estas líneas, pero es real.
Querida Claudia, has partido temprano, seguiremos compartiendo la música, esa frecuencia que nunca se pierde, trasciende los tiempos y sobrevive a la vida. La Música siempre nos salva, nos une, nos conecta desde la dimensión y tiempo que nos encontramos. Un Abrazo y cariño muy grande a tu Recuerdo- Presente en tu música.

Adrian & Kay McGrath. Querida Claudia, desde el momento en que te conocimos nuestras vidas se llenaron de tu alegría y la belleza de tu música. Desde el fondo de nuestros corazónes te agradecemos por compartir tu increíble aventura con nosotros, sabemos que no querías irte, tenías mucha más música para regalar a este mundo, pero nos dejaste con un tesoro más allá de la imaginación. Nos llamaste tus "angelitos", y siempre lo seremos.

 
María Rosa Montagut. El destino trajo a Claudia Montero a la ciudad de la música y de la luz, Valencia, donde entró en mi vida hace aproximadamente una década. “Mi lema es trabajar para los sueños” decías... Y muchos se cumplieron y cuando los alcanzaste no te los quedaste para ti sola sino que los compartiste con tus seres queridos. Hermosa por fuera y por dentro, pura energía positiva, siempre sumando con un ímpetu contagioso. Compusiste “Luces y sombras“ pero yo nunca te vi ni una sombra, siempre vi en ti solo la luz. Tu personalidad arrolladora nos atrapaba a los que te conocíamos y te queríamos y tú lo sabías y te encantaba. Ahora nos queda tu música, escucharla y sobretodo interpretarla para estar más cerca de ti aún si cabe. Hoy, triste y desolada, doy gracias a la vida por haberme regalado tu amistad incondicional, por las risas y los vinos que hemos compartido, por nuestras complicidades y secretos. Vuela alto amiga, como siempre has hecho.

Floraleda Sacchi. When I think to Claudia I always think to love. We met in 2010 and I instantly loved her music so clear and intense emotionally. I would define it sincere. She was not so well known at time as she is now. She instantly was generous and sent me a piece for solo harp called Evocaciones. We collaborated at the piece. She was always humble and asking for suggestions and opinions. An attitude that is precious and rare. I performed her music a lot and we were always in touch especially when she fall ill for the first time. Then came the first Latin GRAMMY and her recovery. She told me: as I felt healed the adagio for the harp and string concerto came in my mind. The piece was finished soon after and there too she left space to me for the cadenzas and the editing. We recorded in Prague under the snow. We met many times in Valencia. She wanted me absolutely at the Latin GRAMMY in 2018. I felt really honored to have her admiration. Last time we met we were in Valencia. All the times we met we were speaking about love. Her love for her children, for Jose, for music, my love feelings. She was always giving delicate advices and telling me when I play her pieces she felt so much love and emotion and that we have this emotional intensity in common. I will miss her and will continue to play her music and, and if I have to remember her is for love.

Jorge Sad Levi. Conocí a Claudia Montero a fin de los años 90, fue mi alumna de composición y medios electroacústicos en el Conservatorio Alberto Ginastera. Fue una de las pocas, creo que la única alumna en 20 años con la que decidí no confrontar sobre su lenguaje musical (mis ex alumnos lo saben bien), encontrándola tan segura de lo que se proponía que no era posible ni deseable obligarla a entrar en la lógica Adorniana, por cierto obsoleta de la modernidad como tensión del compositor con los procedimientos más avanzados de su época. Su escritura no era una huida al pasado ni un recurso hacia la consecución de público, pensaba cabalmente en grande y desde otro lugar, lugar que nunca definió por oposición a alguna categoría dominante, sino por el contrario, a partir de estar en su centro, ser su propio centro. Si la versión original del ser humano es el género femenino y los varones somos una copia bastante mala del original, podríamos pensar, como creo que pensaba ella, que no se trata de componer músicas del futuro, con un oído puesto en la historia, sino más bien pensar músicas posibles que irradian desde su propio eje hacia el mundo. Claudia nos muestra con sus obras que escuchar es otra cosa, tal vez, una vital desobediencia, desobediencia que le permitió y seguirá permitiéndonos escuchar su voz profunda a través del ruido. JSL

Alexis Vallejos. Hoy el tañer de nuestras guitarras se quiebra de pena, la mágica compositora Claudia Montero nos ha dejado. Su aporte al repertorio musical de nuestro instrumento fue tan fuerte y consistente que lo único que podemos hacer es agradecer por el tesoro que nos ha dejado y proporcionarle sonido, ya que, es la forma de recordarte y retransmitir tu arte. A modo personal siento con mucho pesar tu partida querida maestra, en nuestras conversaciones siempre tenías bellas palabras y comentarios para entregarme además de poseer un corazón realmente desinteresado y honesto, el cual se ve reflejado en tu música, donde solo se emiten sonidos puros y sin búsqueda de impresionar, siempre con un discurso sincero y proveniente del corazón. Nuestro círculo está muy triste por tu partida, vuela alto y descansa en paz maestra Claudia Montero.

Lucía Zicos. Nuestro primer contacto fue en 2011 a través de Facebook. Claudia estaba en España y yo en Buenos Aires. Casualmente, íbamos a coincidir en Londres unas semanas después y allí nos conocimos en persona. Nos encontramos en Trafalgar Square y charlamos de nuestras vidas, de la música y de los miles de proyectos que se nos ocurrieron para hacer juntas. Un tiempo después me llamó y me dijo "Lucía, vamos a grabar mis obras para cuerdas. Vamos a hacer un disco y vamos a ganar un Grammy". A mí me pareció una entusiasta, cuanto menos, pero no quise pincharle el globo. Recuerdo que durante la grabación lo repetía todo el tiempo "vamos por el Grammy" y Daniel Robuschi (violín solista) me miraba como diciendo "no sabe lo que dice...". Pero si sabía. El Grammy llegó y la obra premiada fue justamente el Concierto para violín. Ella se definía en lo compositivo como una romántica urbana con un respeto absoluto por las formas musicales, conservando su identidad porteña "lo tengo en el ADN", decía. Quizás la combinación entre la claridad formal y los ritmos urbanos es lo que hace que a la gente le guste escuchar su música. O tal vez su exquisita pluma para los momentos líricos, sin duda -a mi entender- su mejor cualidad. Siempre hablábamos de lo que significaba combinar (o coordinar) la vida profesional con la personal para una mujer. Ella se las ingenió muy bien para hacerlo todo con cuatro hijos: estudiar, trabajar, buscar nuevos horizontes, nunca dejar de perseguir sus sueños. Y también de lo que significa pertenecer al género femenino en el mundo musical "Lucía, los tipos me vienen con preguntas de qué quise escribir en tal compás, yo les respondo mientras me retoco el rouge". Era genial. Intrépida. Atrevida. Luego vino la grabación del disco "Mágica y Misteriosa" en Praga. No sólo grabamos en los Smecky Studio (donde se graba la música de cientos de películas hollywoodenses), además se hizo un videoclip para presentar el CD, como si fuera toda una artista pop. Era una artista, sin duda. En muchas cosas estaba más allá de todo. Sin embargo, el entusiasmo de que su música sonara siempre estuvo fresco "Lucía, ¿leísta mi obra? ¿Cómo sonó? ¿Gustó?". A la distancia seguía el minuto a minuto de todo el proceso de preparación y si no podía estar presente en el concierto se las ingeniaba para tener a alguien en el público que le contara cómo se sentía su música en vivo. Creo que todavía no se tiene conciencia de la importancia de su legado. Más allá del corpus musical, abrió caminos que disfrutarán muchas otras. No sólo ganó 4 Latin Grammy. Fue la primera mujer compositora en obtener ese galardón en el rubro composición clásica contemporánea (lo hizo además no una sino tres veces) y la primera en obtener la distinción de mejor álbum junto con mejor composición en una misma gala. Además, fue convocada como compositora residente en el Palau de la Música de Valencia, creo que por primera vez una mujer, y recibió encargos de instituciones europeas y norteamericanas, entre ellas de la Royal Liverpool Philharmonic en dupla con la Munich Philharmonic. Fue un ejemplo de lo que la vida debe ser. Siempre decía "hay que tener los sueños claros y después trabajar para que se hagan realidad". Ella lo hizo así. Vivió intensamente. Fue Generosa. Amorosa. Torbellino de energía. Mágica y Misteriosa. Simplemente Claudia. Te quiero nena y se te va a extrañar. Gracias por tu música.


 
Descanse en paz

 

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