Ismael G. Cabral |
«Se puede ser todo lo exigente y riguroso que se quiera sin ser demasiado grave» Mauro Lanza
26/06/2020
Una entrevista de Ismael G. Cabral para El Compositor Habla.
"En términos generales la música contemporánea tiende a ser muy seria"
La música de Mauro Lanza (Venecia, 1975) resulta casi inmediatamente reconocible. El uso de la ironía (en la integración en sus obras de instrumentos convencionales y todo tipo de artefactos sonoros) confieren un tono lúdico en ocasiones a unas partituras que no desdeñan complejos procesos estructurales y un dominio superlativo del timbre y el (enrarecimiento) armónico. Hace unos meses el sello Stradivarius publicaba Systema naturae (2013/17), un ciclo de cuatro obras para ensemble e instrumentos electromecánicos realizado en total fusión creativa con Andrea Valle. Sobre esta sorprendente creación, que todo auditor curioso por la música de hoy deber oír, versa buena parte de las siguientes lineas.
1. Ismael G. Cabral: Estudió con maestros muy dispares, entre ellos, Brian Ferneyhough, Salvatore Sciarrino y Gérard Grisey. ¿Qué le atrajo de cada uno y cómo le ayudaron a conformar su propia vía de exploración musical?
Mauro Lanza: Realmente con Ferneyhough estuve poco tiempo, al igual que con Grisey, que falleció poco después de que me trasladara a París. Con Sciarrino sí que realicé un par de cursos de verano en unas clases en las que coincidí con otros compositores y amigos como Francesco Filidei, Lorenzo Pagliei y Carlo Carcano. Aquellos cursos fueron especialmente importantes porque me permitieron un intercambio de ideas e informaciones muy suculentas... no hay que olvidar que por aquel entonces, tenía yo unos 20 años, no existía Internet como lo conocemos hoy.
Pero respondiendo a su pregunta y en aras de la mayor simplificaicón diré que de Sciarrino me llevé un cierto deseo de franqueza ("¿No estás ya cansado de esto?", me dijo una vez frente a una partitura de música puntillista torpemente convencional. "¡Escribe algo claro!", me espetó). De Grisey me quedo con su conciencia sobre el tiempo y la forma (... por no mencionar también la armonía, muchas de las técnicas que empleo están basadas en el tono aunque yo no sea un compositor espectral). Y de Ferneyhough pues guardo con él una vaga afición por los procesos logarítmicos. Finalmente, venirme a París y entrar en contacto con compositores espectrales de "segunda generación" (no estoy seguro de si les gustaría esta definición) fue muy importante para mí. Hablo de Philippe Hurel, Philippe Leroux y Jean-Luc Hervé.
2. I.G.C: ¿Y quizás siente también, en algún lugar más recóndito, la influencia de los grandes compositores de la vanguardia italiana, los Berio, Donatoni, Nono, Maderna...?
Mauro Lanza: No puedo negar que me han influenciado compositores como Sciarrino o Nono, probablemente suya fue la primera música contemporánea que escuché en mi adolescencia. Pero siempre traté de evitar cualquier referencia directa a sus trabajos. Más tarde, ya en París y cuando tenía veintitantos años, tuve la oportunidad de conocer la música de Fausto Romitelli, que también me impresionó profundamente. Tanto que dediqué a él The 1987 Max Headroom broadcast incident, para cuarteto de cuerda y electrónica.
3. I.G.C: Su lenguaje musical es claramente exploratorio y está estrechamente ligado con el (por otra parte heterogéneo) momento estético actual. Pero hay una apreciable desinhibición en sus obras, algo que por cierto no está lejos de Romitelli, al que mencionaba. ¿Podríamos hablar de una cierta sensibilidad mediterránea o esto sería recurrir a un tópico?
Mauro Lanza: Sinceramente no puedo afirmar si ese tono más desprejuiciado al que, infiero, se refiere es un rasgo común entre los compositores de ciertos países del Sur de Europa. En términos generales la música contemporánea tiende a ser muy seria. Y yo pienso que uno puede ser todo lo riguroso y exigente que desee sin ser demasiado grave (desafortunadamente, lo contrario también es posible). Pero... en fin, no creo que esto esté relacionado de alguna manera con la inhibición o la desinhibición.
4. I.G.C: Systema naturae es un formidable ciclo que ha editado, meses atrás, el sello Stradivarius. ¿Qué le llevó a escribir este inopinado conglomerado sonoro de referencias botánicas y biológicas?
Mauro Lanza: Es un ciclo de cuatro obras, cada una dedicado a un reino natural diferente: Regnum animale, Regnum vegetabile, Regnum lapideum y Fossilia. Dos referencias se encuentran en la base de toda la composición. La primera es la tradición medieval de bestiarios, herbarios y lapidarios, concebidos como catálogos multifacéticos de seres diversos, entre los cuales se pueden definir varias relaciones. La variedad y heterogeneidad de estas colecciones es notablemente evidente en los primeros ejemplos literarios, que son listas de criaturas fantásticas, piedras, animales y plantas. Una segunda referencia fue la taxonomía, la descripción sistemática de los organismos vivos se remonta al Systema Naturae de Linneo (de ahí el nombre de todo el ciclo). Fue un intento racionalista de ordenar la apariencia polimorfa (y muchas veces teratomórfica) de la naturaleza.
El concepto de catálogo es central para la composición y podría entenderse como una forma de organizar la música. Cada Regnum está estructurado como una secuencia de piezas cortas, cada una dedicada a un animal, planta, piedra o fósil imaginario. Dentro de los cuatro Regna el número de piezas disminuye, mientras que la longitud de las partes aumenta progresivamente, desde los 24 fragmentos pequeños de 40 segundos que conforman Regnum animale hasta las seis partes largas de Fossilia, el epílogo de todo el ciclo.
5. I.G.C: En la realización de la obra usted colaboró con Andrea Valle, ¿cuál fue su exactamente su contribución?
Mauro Lanza: Hemos tratado de explicar varias veces que es conceptualmente incorrecto pensar en términos de la suma de dos partes individualizadas. En resumen, ambos somos compositores y ambos estamos interesados en fuentes de sonido extrañas e instrumentos mecánicos. Esto se puede apreciar en las obras de cada uno. En Systema naturae colaboramos en la planificación general de la composición, pero también en la implementación de los algoritmos utilizados, en el diseño y la creación de los instrumentos y los objetos mecánicos, en las elecciones armónicas... ha sido un trabajo de retroalimentación constante. Uno de nosotros podía comenzar una idea, una línea melódica, un procedimiento, elegir un instrumento y luego el otro recogía la misma idea y, desde ahí, seguía desarrollándola y transformándola. Por eso es irrelevante a la postre distinguir qué es de uno y qué es de otro.
6. I.G.C: Habla de instrumentos mecánicos y objetos. Ciertamente el grupo (en el caso de la grabación, el mdi ensemble) está literalmente invadido por una serie de dispositivos electrónicos. ¿Qué puede contarnos sobre ellos?
Mauro Lanza: La mayor singularidad de Systema naturae radica en la coexistencia de instrumentos acústicos tradicionales y diferentes configuraciones de dispositivos electromecánicos que son algo parecido a lo que podríamos denominar "objetos pirateados".
En Regnum animale la configuración incluye un trío de cuerdas rodeado en círculo por una gran cantidad de dispositivos accionados por computadora y construidos a partir de objetos y electrodomésticos cotidianos desechados y reciclados (cuchillos eléctricos utilizados como excitadores para platillos, relojes, tocadiscos, viejos reproductores VHS empleados como instrumentos de fricción, etc...)
En Regnum vegetabile se incluye un sexteto tradicional de instrumentos acústicos (trío de cuerdas y trío de vientos: flauta, oboe y clarinete), frente al cual se coloca una línea de 30 secadores de cabello modificados que son controlados informáticamente. Estos actúan como dispositivos capaces de producir corrientes de aire que activan diversos instrumentos pequeños de viento como flautas dulces, ocarinas, armónicas, trompetillas de juguete...
Aunque sigue la misma organización que las piezas anteriores, Regnum lapideum presenta también instrumentos de percusión y de cuerda pulsada. El conjunto de dispositivos electromecánicos incluye a su vez este tipo de instrumentos. Finalmente, Fossilia involucra a diez instrumentos (todos los que han participado en las otras obras), además de hasta 90 dispositivos.
Andrea [Valle] y yo queríamos que la composición se situara en un término medio en el que los objetos electromecánicos y los instrumentos tradicionales fueran intercambiables. Por lo tanto los objetos se controlan a menudo de una forma musical estándar, incluso básica, mientras que contrariamente, los instrumentos musicales son abordados de forma similar a un objeto, mediante un amplio uso de técnicas extendidas y espectrales.
7. I.G.C: Experiments in the Revivals of Organisms es una composición para orquesta que escribió en 2018. Por su título podríamos pensar que guarda alguna relación con Systema naturae...
Pues en realidad es una obra completamente diferente. Si Systema era una partitura muy fragmentada, Experiments... consta de solo dos secciones. Además mientras que las referencias en el ciclo del que hemos estado hablando son innumerables, en esta obra la única cita es del último movimiento de la Sinfonía nº2 de Mahler, hasta tal punto que toda la composición puede ser considerada como un gran marco que encierra esa cita, como un relicario que protege un pequeño trocito del hueso de un santo. Experiments... trata de la resurrección, oponiendo dialécticamente la perspectiva religiosa de Mahler a la creencia secular de la que vida inmortal y el renacer de los muertos es algo científicamente posible. De hecho, el título está tomado de una película de 1940 que documenta la investigación llevada a cabo por científicos soviéticos para reanimar organismos clínicamente muertos.
8. I.G.C: ¿En qué se encuentra trabajando?
Compongo una pieza para el conjunto Talea y dos nuevos cuartetos de cuerda con electrónica. Estos cuartetos, como el anterior que escribí hace tres años, se basan en documentos de audio no musicales que abordan diferentes aspectos de la transmisión de información. Incluirán transmisiones de radio de mensajes cifrados dirigidos a oficiales de inteligencia que operan en países extranjeros y grabaciones de sonidos espaciales de satélites y naves tripuladas. Como por ejemplo las infames cintas de los hermanos Judica-Cordiglia, dos radioaficionados italianos que hicieron grabaciones de audio que supuestamente respaldaron la teoría de la conspiración de que el programa espacial soviético encubrió muertes de cosmonautas. Todo el ciclo se estrenará en el Festival de Witten en 2021.
Las fotos de Mauro son de Andris Kozlovskis y han sido facilitadas amablemente por el compositor para esta entrevista.
Ismael G. Cabral
Soy periodista (no solo) cultural en Sevilla. Pasé 16 años en la redacción de 'El Correo de Andalucía' (2002-2018). Actualmente escribo sobre música en las revistas 'Ópera Actual', 'Scherzo', 'Sul Ponticello' y El Compositor Habla. Y sobre animales en el portal 'Wamiz'. En el pasado, también investigué radio y televisión. Buscando nuevos horizontes.