Señalado como el padre de la música cibernética la figura del alemán Roland Kayn (1933-2011) ha permanecido durante décadas sumida en la más absoluta oscuridad, con una obra que solo elogiaba y admiraba el selecto grupo de personas que conocía su legado. En los últimos años su hija, Ilse Kayn, se ha centrado en divulgar su enorme catálogo de composiciones electrónicas (algunas concebidas en el célebre Instituto de Sonología de Utrecht). Obras, muchas de ellas monumentales en sus formas, cuyas texturas se despliegan durante horas y que no se parece a ningunas otras. Páginas gaseosas y gélidas como
Tektra,
Infra,
Simultan o
Scanning son hoy reivindicadas como obras maestras absolutas de la composición electroacústica, del arte sonoro. Su música, ambiciosa y creada en voluntario aislamiento, se entiende ahora como precursora de otros géneros adscritos a una cierta idea de lo (pop)ular como el
ambient y el industrial, que anticipa lejanamente. Kayn es una voluminosa isla de sonido que al fin podemos, bajo nuestro riesgo, explorar.
1. Ismael G. Cabral: Edición de obras inéditas en disco celebradas con alborozo en las redes, una nueva página web y, recientemente, también un muy activo espacio con novedades en Bandcamp. Mucha gente parece haber descubierto al fin a Roland Kayn y su figura crece como la de un pionero fundamental en la música electroacústica. Parece que el vaticinio de su padre se está cumpliendo; su música pertenecía al futuro y ese futuro ¿es el presente?
Ilse Kayn: Sí, completamente. El interés por su música ha crecido exponencialmente en los últimos dos o tres años. Son precisamente los jóvenes los que más se interesan y se interrogan por la obra de Kayn. El lanzamiendo, por parte del sello finlandés frozen reeds en 2017, de la obra de 14 horas
A little Electronic Milky Way of Sound (2009) supuso un paso fundamental en la difusión. Y ahora Bandcamp está ayudando mucho. Con solo pulsar el botón de 'play' cada nueva obra que subo puede ser escuchada en cualquier país del mundo. A Roland le hubiera encantado todo esto. Mi decisión de compartir su catálogo en Bandcamp surgió esta pasada primavera, cuando mucha gente tuvo que permanecer encerrada en sus casas por el coronavirus. Quise hacer algo, poner algo de mi parte para hacer más llevadero aquel tiempo. Así es como abrí su archivo y comencé a hacerlo accesible internacionalmente. Recibo muchos comentarios y los aficionados a la música experimental sienten una gran curiosidad por mi padre, incluso me piden que escriba una biografía y que se filme un documental.
2. I.G.C: El catálogo de obras de Roland Kayn es ingente. ¿Ha podido usted escuchar toda su obra?
Ilse Kayn: Poco a poco lo voy haciendo. Dedico una gran cantidad de tiempo a oír todo su legado y selecciono cuidadosamente las obras que voy dando a conocer. Mi idea es ir sacando a la luz composiciones de distintos períodos creativos para que los interesados se hagan una idea bastante certera de toda su creatividad. Y, aunque en el archivo aguardan obras muy, muy largas todavía, de momento estoy optando por aquellas que rondan la hora de duración. Pero también hay piezas que todavía no sé cómo verán la luz, si en formato digital o en CD.
3. I.G.C: ¿Qué lugar cree que ocupa Kayn en el conglomerado de la música contemporánea o, de una forma más abierta, en la creación musical de la segunda mitad del siglo XX?
Ilse Kayn: Ninguno. Roland fue un pionero y un espíritu absolutamente libre. No creo que se pueda describir su obra bajo el paraguas de ningún estilo. Así como tampoco pienso que pueda asociársele con una escuela o estética concretas. Con su música cibernética él siguió un camino que nadie más transitó, casi diría que se excluyó de toda etiqueta. Desde luego que su elección no fue fácil -incluso llegó a eliminar muchas de las obras que escribió en los años 50- en un momento en el que imperaba la música atonal y estéril, deudora de la Escuela de Darmstadt.
4. I.G.C: También compuso piezas instrumentales. ¿Le daba el mismo valor que a su obra electrónica?
Ilse Kayn: En unas composiciones y otras su afán fue idéntico, buscaba la libertad. Escribió importantes obras instrumentales (
Sequenzen,
Aggregate,
Vectors I...) pero no es nada sencillo oirlas en concierto. Es verdad que ahora empiezan a llegar algunas peticiones, el interés por su música también está despertándose hacia su música instrumental pero, de momento, no se ha concretado nada. Tengo mucho interés y curiosidad por saber cómo sonaría
Galaxis, una obra cuya partitura goza de una cierta difusión por su espectacularidad visual. En ella los músicos tienen una enorme libertad para tomar múltiples decisiones; las notas escapan de los pentagramas...
5. I.G.C: En efecto, en su catálogo, aguardan obras desconocidas que se extienden durante horas como Spectral, Garaans o The Ortho-Project. ¿Verán la luz?
Ilse Kayn: Sí, pero todo este proceso llevará su tiempo. Mi misión es que su archivo sea accesible para todo el mundo. Y, como dice, aún quedan obras muy largas esperando su momento. Poco a poco iré decidiendo cómo se publicarán. Hay seguidores, entusiastas de Kayn que quieren su música en formato digital, pero también existen coleccionistas que querrían ver estas músicas editadas en CD, en vinilo e ¡incluso en cintas de cassette!
6. I.G.C: ¿En el ámbito puramente familiar hablaba su padre de la música que componía?
Ilse Kayn: He crecido con su música pero, honestamente, no hablábamos mucho de ella. Fue más tarde cuando me involucré cada vez más y más con su obra y me concentré en dar a conocer su trabajo.
7. I.G.C: ¿Cómo definiría a su padre, al margen de su dedicación?
Ilse Kayn: Fue un hombre íntegro, autodidacta y muy intelectual. Digamos que tuvo una visión musical que persiguió toda su vida, eso hace que su obra suene muy sincera, pura. Vivía abstraído y obsesionado con su música y esto impidió que no pudiera disfrutar mucho de él a nivel personal. Todos los veranos me iba con mi madre de vacaciones mientras él no descansaba, seguía ocupado, trabajando. "Tu padre es un artista", decía mi madre. Y con eso estaba dicho todo. A pesar de sus circunstancias tuve un vínculo muy fuerte con él, y le acepté plenamente tal y como era. Conocí su peculiar sentido del humor, le escuché contar innumerables historias y aprendí de su infinito e incansable perfeccionismo.
8. I.G.C: ¿Mantuvo Kayn relaciones más o menos estrechas con otros compositores de su generación?
Ilse Kayn: No. Claro que conoció a otros músicos pero, realmente, a él solo le interesaba su obra. Vivió retirado y aislado. Además, tras su jubilación mis padres se retiraron a una casa rural en Groninga (Holanda) y, hasta su muerte, estuvo dedicado en cuerpo y alma a sus composiciones.
Más información en la web de
Roland Kayn
Más información en
Roland Kayn-Bandcamp
Las fotos de Roland Kayn pertenecen al archivo personal de Ilse Kayn y han sido faciliadas por Ilse, su hija amablemente.
La foto de Ilse Kayn es de Jacq Roos
© Ismael G. Cabral - septiembre 2020
Ismael G. Cabral
Soy periodista (no solo) cultural en Sevilla. Pasé 16 años en la redacción de 'El Correo de Andalucía' (2002-2018). Actualmente escribo sobre música en las revistas 'Ópera Actual', 'Scherzo', 'Sul Ponticello' y El Compositor Habla. Y sobre animales en el portal 'Wamiz'. En el pasado, también investigué radio y televisión. Buscando nuevos horizontes.