Ismael G. Cabral |
«Las influencias son como un sedimento para nuevas obras, aunque se sitúen en otra órbita» Alberto Carretero
21/03/2023
Una entrevista de Ismael G.Cabral para El Compositor Habla.
El 40º Festival de Música Antigua (FeMÀS) propone el próximo 24 de marzo un singular y hasta provocador acercamiento a la idea de músicas históricas. La Orquesta Bética de Cámara, que fundara Manuel de Falla, celebrará el centenario de El retablo de Maese Pedro, del compositor gaditano, proponiendo una nueva interpretación en el arreglo del propio músico para esta formación de raigambre andaluza. Además, en forma de estreno absoluto, encargo del Centro Nacional de Difusión Musical (CNDM) y la Junta de Andalucía, se escuchará El retablo de las maravillas, libérrima aproximación a la obra referenciada de Alberto Carretero (1985). El compositor sevillano, que en la conversación avanza detalles de la nueva partitura y de la relación de esta (y suya misma) con Falla, presentó además hace unos meses la vídeo-ópera Renacer, que generó elogiosos comentarios. Y tiene previsto estrenar otra ópera de gran formato, La bella Susona, en marzo de 2024 en el Teatro de la Maestranza de Sevilla.
1. Ismael G. Cabral: ¿De qué manera se relaciona El retablo de las maravillas con El retablo de Maese Pedro, de Manuel de Falla, más allá de la parcial coincidencia en el título?
Alberto Carretero:El retablo de las maravillas es una obra conmemorativa del centenario del estreno absoluto de El retablo de maese Pedro de Manuel de Falla en Sevilla. Por ello, está escrita para la misma plantilla orquestal, a excepción de las voces, que en este caso son sustituidas por textos que el espectador puede leer como si fueran cartelas de cine mudo o rótulos de ópera. Además, incluye guiños y recursos intertextuales a modo de homenaje. Los gestos sonoros establecen vínculos musicales con la acción que tiene lugar en el entremés El retablo de las maravillas de Cervantes. Se trata de una visión programática actual que se vale del juego de texturas, la superposición de estratos tímbricos y rítmicos, así como la caracterización sonora de los personajes. A través de la escritura instrumental, se evocan musicalmente los movimientos teatrales y coreográficos, convirtiendo las posibles escenografías en "paisajes orquestales".
«Aunque el armazón inicial sobre el que se ha construido la composición está en las imágenes y escenas sugeridas por el texto, la música adquiere finalmente su propia autonomía y puede vivir sin depender del soporte textual o visual.»
2. I.G.C.: Después de presentar recientemente la vídeo-ópera Renacer y aun entendiendo que estamos ante una obra muy diferente, ¿hay algún trasvase de ideas o elementos en común?
Alberto Carretero: Efectivamente, estamos hablando de dos obras muy diferentes, con ideas musicales bien distintas. Sin embargo, como "son del mismo padre", creo que sí existen elementos comunes relacionados con mi manera de concebir los sonidos instrumentales, los tejidos orquestales, las formas y las influencias de la experimentación sonora a través de los timbres electrónicos.
«Asimismo, también me interesa siempre la permeabilidad con otras músicas, otras artes y otras formas de pensamiento.»
3. I.G.C.: La Orquesta Bética de Cámara es una formación, hasta ahora, muy alejada de la música actual. ¿Condiciona este hecho en algo las exigencias de su nueva partitura?
Alberto Carretero: Precisamente, cuando se fundó la Orquesta Bética de Cámara, la concepción de Falla era que la nueva agrupación centrara su repertorio en la música orquestal menos interpretada en las salas de concierto en aquel momento, con especial atención a la música de sus contemporáneos. Creo que este debería ser siempre el horizonte de esta orquesta que cuenta con músicos de primer nivel y un director extraordinario, el maestro Michael Thomas. En cuanto a las exigencias de mi partitura, no son caprichosas, sino que responden a ideas musicales. Por lo tanto, hay técnicas que precisan de más atención y estudio, ya sea a nivel individual o grupal, por no ser habituales.
«He podido trabajar mano a mano con gran parte de los músicos, tal y como suele ser mi proceso de creación, con el fin de que la realización de mis propuestas sonoras fueran lo más efectivas e interesantes posible.»
4. I.G.C.: La relación con Falla de no pocos compositores españoles de la segunda mitad del siglo XX no ha sido siempre fácil. ¿Cuál es su interés y también, su posible crítica, hacia su legado y a la influencia que causó posteriormente?
Alberto Carretero: Creo que partimos de la base de que todos somos conscientes de la importancia de la figura de Manuel de Falla para la música española, independiente de la afinidad estética. Su amplia producción y la calidad de sus obras lo convierten en un compositor fundamental, no sólo para la música hispana del siglo XX, sino también a nivel internacional por sus vínculos estéticos con Europa. En mi caso, siento gran respeto y admiración por su legado y es para mi un honor rendir homenaje a su retablo, componiendo uno nuevo que dialoga con el suyo. Como suelo decir, las influencias de su música y la de otros tantos maestros siempre son como un sedimento de nutrientes y aprendizajes que inspiran la creación de nuevas obras, aunque se sitúen en otra órbita.
5. I.G.C.: Hace algunos años la Sinfónica de Sevilla interpretó Diario de a bordo. ¿Cuando piensa en obras que van quedando atrás en el catálogo se siente igualmente estimulado por ellas por ejemplo ante la posibilidad de una nueva interpretación?
Alberto Carretero: Cada obra nace en un momento vital muy diferente de mi trayectoria. Observar y escuchar desde el presente el camino que he ido recorriendo durante todas esas etapas me resulta enormemente emotivo y estimulante para seguir andando y descubriendo nuevas rutas. Cada nueva interpretación de una obra le confiere nueva vida y una nueva visión.
«Aquí es donde el trabajo con los intérpretes vuelve a ser muy gratificante, al pasar de nuevo por las mismas huellas, pero con otros pies y otros zapatos.»
6. I.G.C.: Volviendo a Renacer en esta obra se admiraba su capacidad para sintetizar sensibilidades y derivas de la actual composición. ¿Se identifica con esa idea de arremolinar múltiples estéticas de la contemporaneidad en torno a su obra?
Alberto Carretero: No me interesa la idea, normalmente peyorativa, de música ecléctica. Para la composición me atrae el concepto de síntesis, es decir, crear algo original a través de un trabajo personal con distintos elementos y técnicas que al pasar por mi tamiz se convierten en algo nuevo. Tales elementos y técnicas del lenguaje pueden depurarse de infinitas influencias, no sólo musicales, y también pueden combinarse con nuevas ocurrencias o ingenios.
«Para mí, la cuestión está en cómo afrontar estas materias primas para originar ideas musicales que inspiren y expresen.»
7. I.G.C.: Como docente que está en continua interacción con jóvenes alumnos de composición, ¿cuál o cuáles son las tendencias o líneas que detecta más interesan a los jóvenes creadores?
Alberto Carretero: La verdad es que me apasiona acompañar a las próximas generaciones de colegas en sus etapas de formación. Me resulta muy inspirador y es un intercambio de ideas y experiencias muy enriquecedor para todos. Algo muy interesante que observo es la gran libertad con la que afrontan la composición y el respeto por una enorme diversidad de estilos y tendencias, que conviven con naturalidad y sin someterse a dogmas de ningún frente. Por otro lado, las tecnologías suelen interesar bastante, así como los proyectos interdisciplinares y multimedia donde frecuentemente se integran. Creo que deben ir adquiriendo la madurez suficiente para ser independientes y no sucumbir a dogmas ni banalidades. Espero que tengan la energía para reinventarse y no caer en la comodidad de repetir esquemas.
8. I.G.C.: Hablando de posibles vías, y aunque nunca se relacionó con ella, ¿qué sucedió con esa posmodernidad llamada a barrer las músicas más arriesgadas?
Alberto Carretero: Yo creo que las estéticas que se quedan sin terreno para explorar son aquellas que cierran y se limitan, incluso a veces auto-reivindicándose para no caer de su supuesta "torre de marfil". Los prefijos "neo" y "pos" suelen aludir a una cierta nostalgia que gira en un círculo cerrado, que rechaza cualquier "contaminación" que pudiera amenazar la continuidad de ese círculo. Personalmente, no es algo que me interese y veo que pronto se queda aislado, hermético. Y no sólo me estoy refiriendo a la neotonalidad, sino también a cualquier línea que intente reivindicar la necesidad de ponerle vallas al campo y mire con malos ojos (u oídos, en este caso) cualquier cosa que esté al otro lado de la valla, lo que demuestra cierta frustración.
9. I.G.C.: Algo que sí ha practicado es la puesta a disposición de su música en relatos que provienen de otras disciplinas (flamenco, teatro, danza contemporánea...). ¿Cuánto hay de visibilidad y subsistencia en ello y cuánto de verdad, de interés por confrontar o relacionar el lenguaje con otras prácticas?
Alberto Carretero: Independientemente de que crea que la visibilidad y la subsistencia también puedan ser muy verdaderas, creo que no es mi caso. Los cruzamientos de mi música con otras formas de ver el mundo, a través del arte, la ciencia o cualquier forma de pensamiento, siempre me resultan estimulantes y me aportan gran conocimiento y experiencia que me permiten explorar nuevos territorios. Creo que cada vez el arte camina más en esa dirección, que también es un reflejo de nuestro mundo globalizado. El reto es mantener la esencia y la individualidad incluso cuando estemos mezclados y enriquecidos por otras visiones.
10. I.G.C.: La ópera La bella Susona sigue esperando su estreno en el Teatro de la Maestranza de Sevilla ¿Ha vuelto a repensar esta partitura?
Alberto Carretero: Precisamente ahora estoy componiendo algunas partes nuevas. Lo principal permanece, pero se incorporan algunos pasajes para la representación de la ópera. La concepción escénica es ahora más profunda y toca muchas capas culturales que permiten aún más lecturas y escuchas, según los intereses de cada oyente.
11. I.G.C.: ¿En qué otros proyectos está?
Alberto Carretero: Además de la partitura de La bella Susona y la próxima difusión de la grabación en audio y vídeo de Renacer, están de camino otros proyectos, aún en estado embrionario, que ojalá vean la luz pronto. Por supuesto que me interesa el campo discográfico, que además me parece un formato muy interesante incluso como entorno creativo. Espero poder realizar aportaciones en este ámbito próximamente.
La fotografía de Alberto es de la Fundación BBVA y ha sido facilitada por la Fundación.
Aquí tenéis todas la entrevistas, críticas y noticias de Ismael G. Cabral en la sección de Ismael en El Compositor Habla: Atelier de Músicas
Ismael G. Cabral es periodista musical y musicógrafo. Ha trabajado durante 16 años en la redacción del periódico sevillano El Correo de Andalucía. Actualmente, además de ser funcionario del Ministerio de Cultura del Gobierno de España, es colaborador especializado en música contemporánea en las revistas El Compositor Habla, Ópera Actual y Scherzo.