Hace unos días cuando hablamos con el compositor madrileño Alejandro Román con motivo de la grabación de buena parte de su música de cámara, nos habló detalladamente de cada una de las obras que componen este trabajo discográfico. Una de esas obras es Nocturno para Mezzosoprano, Viola y Piano Op. 54 obra para la que se ha contado con la mezzosoprano Marta Knörr. Esta canción, nos comentaba Román:
En esta ocasión hemos podido hablar con Marta sobre este trabajo, y estas han sido sus impresiones:
1. Ruth Prieto: ¿Cómo surge la inclusión de esta obra en este trabajo discográfico sobre la música de cámara de Alejandro Román?
Marta Knörr: Alejandro Román me telefonea hace un par de meses para hablarme acerca de este proyecto de grabación con su música para el sello Naxos y de la idea de incluir esta obra para voz, piano y viola. Mi contacto con Alejandro surge cuando siendo yo directora del Fest3Cantos, le pido un encargo para estrenar. Este fue el origen de su obra Diégesis opus. 52 que fue interpretada en el concierto de clausura de la XIV edición por el trío Arbós, y sin todavía saberlo, el origen de Nocturno. Dado el éxito que tuvo la obra de Alejandro y lo que me gustó su música, se me ocurrió pedirle que compusiera una obra para incluirla en un programa en uno de mis conciertos. Él aceptó mi propuesta y compuso esta delicada pieza para voz, viola y piano, que habiendo tenido Alejandro el detalle de dedicarme, estrené en octubre de 2015 en un festival en Vitoria- Gasteiz. Siempre estoy interesada en programar música de creación actual en mis recitales y dar al público la oportunidad de escuchar estéticas de este siglo combinadas con programas más convencionales. Las dos canciones para contralto, viola y piano de Brahms, son un referente indiscutible para esta formación instrumental que me interesaba explotar también en obras de nueva creación. No fue para mí una sorpresa la buena acogida que tuvo esta obra en su estreno. Después de este concierto, me pidió mucha gente del público referencias e información sobre Alejandro, que se encontraba presente en este estreno.
2. R.P.: ¿Qué me puede comentar de la música de Alejandro Román?
Marta Knörr: La música de Alejandro tiene la cualidad de sugerir muchas y diferentes cosas. Tiene la virtud de ser muy directa, de una factura muy clara y bien adecuada a los instrumentos para los que escribe, incluida la voz.
3. R.P.: ¿Cómo ha sido el trabajo con Alejandro?
Marta Knörr: El trabajo con Alejandro es siempre fácil. Es una persona cordial, educada y muy respetuosa con todo el mundo. Tiene la paciencia y la flexibilidad que un músico necesita para poder llegar a un punto de acuerdo donde todos los involucrados estemos contentos con el resultado. Pude comprobar estas cualidades cuando me enfrenté a la primera lectura de Nocturno y le pedí algunas variaciones en su composición al observar que ciertas líneas en la voz dificultaban mi emisión vocal, cuestión que a su vez dificultaba la articulación del texto. Alejandro fue muy flexible y comprensivo con mis argumentos y encontró la fórmula con la que yo me sentí más cómoda pero sin alterar la esencia de su música y lo que él quería transmitir con ella. Las características de mi voz y sus peculiaridades, que no son otras que las que van ligadas a mi persona, fueron muy bien entendidas por Alejandro, que tuvo mucha intuición tanto con mi instrumento como con mi sensibilidad. Nocturno es una pieza redonda para las características de mi voz donde mi color vocal sumado al color que aporta la viola da un resultado de calidez que evoca muy sugestivamente al título del maravilloso poema de Illia Galán. Porque no hay que olvidar que el texto elegido para esta pieza, es el origen de todo.
4. R.P.: En concreto de esta obra que es en la que participa: Nocturno, Op. 54. Trío Arbós + Marta Knörr: Mezzosoprano, viola y piano, ¿cómo es esta obra y como ha sido el trabajo con el Trío sobre la música de Alejandro?
Sinceramente, grabar no es la experiencia en la que me siento más cómoda. Supone siempre un plus de concentración máximo que es difícil de mantener en el tiempo que dura la grabación, y la complicación aumenta en proporción al número de músicos comprometidos con el proyecto. En una conversación con la violista Cecilia Berkovich, estábamos de acuerdo en que la experiencia de grabar es un ejercicio básicamente de empatía entre todos los involucrados, ya que hay que ser muy paciente con uno mismo y con los demás, aceptar que hay que parar, repetir, probar, escuchar y ayudarnos entre todos a conseguir esa toma que nos convence aunque quizás no sea la perfecta.
La gran ventaja a mi favor es que el Trío Arbós posee estas cualidades que hacen el trabajo más fácil y fluido. No he tenido ningún problema en entenderme musicalmente con ellos y hemos creado un ambiente muy distendido y agradable. Son grandes músicos.
Las fotos de la entrevista han sido facilitadas por Alejandro Román
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