ISSN 2605-2318

Entrevistas

Entrevista a Maruxa Baliñas


12/07/2018


Entrevista con la musicóloga y directora de Mundoclasico, Maruxa Baliñas. Hemos hablado con ella y nos ha encantado su inteligencia, su valentía y su ironía, en una entrevista sobre música y feminismo. Esto es lo que nos ha contado:


"La prensa musical en España es totalmente masculina. La presencia de mujeres es escasísima, casi anecdótica."









1. Ruth Prieto: Usted es directora de una de las revistas de música más importantes de España. En este ámbito: ¿hay igualdad de género, igual de oportunidades, de reconocimientos?

Maruxa Baliñas: No, en absoluto. La prensa musical en España es totalmente masculina. La presencia de mujeres es escasísima, casi anecdótica. Además suelen hacer críticas locales, pero no les encomiendan conciertos internacionales o grandes festivales. Por supuesto hay excepciones, pero pocas veces encuentro a otra periodista mujer cuando voy a festivales, sí en cambio trabajando en la sección de prensa del festival.

2. R.P.: Como directora de Mundo Clásico ¿se ha encontrado dificultades por el hecho de ser una mujer? ¿Qué piensa usted de esta situación en la que muchas mujeres en puestos habitualmente de hombres, tiene problemas precisamente por ser mujeres?

Maruxa Baliñas: Yo no puedo quejarme de falta de reconocimiento ni de oportunidades. Pero es que mundoclasico.com se creó precisamente para combatir algunas de estas flagrantes deficiencias e injusticias que seguían marcando la realidad de la prensa española en 1999, y que desgraciadamente la siguen marcando. La primera directora de mundoclasico.com fue Luisa del Rosario y ahora yo, siempre mujeres. En este sentido soy una completa privilegiada.
Lógicamente, yo nunca he tenido problemas dentro de mundoclasico.com, pero desde fuera si he notado actitudes algo machistas en jefes de prensa, sobre todo en instituciones públicas. Nada exagerado, simplemente esa suficiencia, esa actitud protectora que se reserva para aquellos que se ven claramente desfavorecidos o minoritarios. Hace unos años, cuando empecé a hacer crítica sí tuve algunas experiencias desagradables, porque había cierta costumbre de terminar reuniones de periodistas organizadas por la Xunta de Galicia (la autoridad regional) con visitas colectivas a locales de alterne, yendo autoridades y periodistas juntos. Y yo consideraba que esas cosas no las debían hablar delante de mí.

3. R.P.: También es usted musicóloga y lleva muchos años ejerciendo la musicología ¿cuál es el balance de estos años?

Maruxa Baliñas: El balance es ambiguo. He disfrutado mucho con algunas de las cosas que he hecho. Pero en ocasiones también me he sentido muy frustrada. Empecé a trabajar como profesora de enseñanza secundaria nada más terminar la carrera y pensaba que podría seguir investigando, es más, que resolver mis problemas económicos sin depender de becas o ayudas me daría más libertad. Pero en España existe una excesiva ‘formalidad’, si no trabajas en una universidad se supone que no tienes derecho a investigar. Me hubiera gustado que se valorara el interés de mis investigaciones, las repercusiones científicas y sociales de mis proyectos, no simplemente si trabajo en una universidad o si mis alumnos son todavía adolescentes. En muchísimas ocasiones he tenido que renunciar a proyectos interesantes y en algunos casos que hubieran sido útiles para la musicología española porque yo no podía pagar con mi sueldo las participaciones en congresos internacionales o en comisiones que implicaran colaborar con otros países.

4. R.P.: ¿Sigue siendo una rareza ser directora, editora, musicóloga invitada a congresos?

Maruxa Baliñas: La musicología en ese sentido es un ámbito mucho más grato para las mujeres. Si bien en los puestos importantes, universitarios o científicos, siguen predominando los hombres, cotidianamente cuando presento una comunicación en un congreso u opino en un debate, no noto diferencia, me siento respetada. De hecho, escribo las respuestas a esta entrevista de vuelta de un congreso y no puedo decir que las mujeres lo hayamos hecho mejor o peor, no veo diferencia. Privadamente si he escuchado quejas de algunas mujeres de la dificultad de organizar la vida familiar cuando deciden asistir a un congreso, sobre todo cuando hay niños pequeños, y que los hombres no se responsabilizan de los niños de la misma manera. A veces ellas no pueden participar en la totalidad de la reunión, solo un día o unas horas por estas responsabilidades, pero también algunos hombres -menos- han tenido problemas de conciliación familiar. Pero esto es problema general, no del mundo de la música.

5. R.P.: Que una sociedad sea moderna, democrática, avanzada depende de la posición de la mujer en ella. ¿Está de acuerdo?, ¿de qué manera, por qué?

Maruxa Baliñas: Todavía viví los coletazos de un feminismo combativo, anti-hombres, que podía ser necesario en aquel momento (años setenta). Pero yo desde muy joven pensaba que empoderar a las mujeres era algo muy positivo también para los hombres, que no debía ser una lucha, sino una mejora para todos. Una sociedad que excluye a un porcentaje amplísimo de su población nunca va a ser una sociedad feliz, ni sana, nunca va a permitir un progreso real (no hablo de economía, que también). La exclusión de las mujeres llevó y lleva en muchas ocasiones a la existencia de un doble mundo, el femenino y el masculino, con valores distintos, objetivos distintos y éxitos distintos. Pero eso acaba siendo esquizofrénico en el peor sentido de la palabra, y negar a los hombres la posibilidad de disfrutar de sus hijos pequeños o enorgullecerse de sus avances, al tiempo que las mujeres tienen que moverse en un mundo doméstico y reducido es hacer a todos desgraciados, hipócritas y solitarios.

6. R.P.: Los hombres: ¿no tienen que implicarse un poco más en la igualdad?, porque parece que da miedo que las mujeres tengan igualdad.

Maruxa Baliñas: Muy a menudo se trata de una cuestión de miedo, inseguridad personal y miedo al cambio. Las mujeres invadimos lo que consideran su terreno y lo hacemos además con bastante eficiencia, mientras ellos se ven menos capaces en el ámbito doméstico, privado y en general emocional.
Pero es que además hay un problema de base grande, que son los valores de la sociedad occidental actual. El progreso, la eficacia, el conseguir metas a menudo basadas en parámetros externos de éxito social, hacen que el cuidado del hogar o la cantidad de tiempo que hay que ‘perder’ para criar y educar a un niño se vean como ‘deberes’, ‘pérdida’ de tiempo, en general poco útiles o valorables.
Y esto es igual para hombres que para mujeres: si digo que he escrito un buen artículo todo el mundo lo ve como algo positivo y valorable, y me felicitan; pero si he pasado la tarde en el parque infantil mirando como un niño –mi niño, mi responsabilidad-- aprende habilidades nuevas, se enfrenta a sus miedos y los supera, se interrelaciona con otros niños con lo difíciles que son siempre las relaciones personales, etc., entonces “no he hecho nada en toda la tarde”
Gran parte del problema es que las mujeres nos vemos obligadas a rendir y a ser eficientes en el mundo ‘exterior’ con sus valores, y al mismo tiempo rendir y ser eficientes en el mundo ‘interior’, la casa, la familia y amigos, lo personal. Y eso es casi imposible.
Parte del problema se ha resuelto al modo ‘eficacia’, ‘mejoras científicas’: o sea, se inventan mejores electrodomésticos, pero eso no resuelve el problema de que gran parte de las cosas ‘interiores’ requieren tiempo. No hay robot para cuidar amigos, charlar, acompañar niños o ancianos, atender a los enfermos, etc.

7. R.P.: ¿Faltan mujeres? ¿Pero dónde, en la foto, en puestos de influencia, en las programaciones? ¿Por qué esta invisibilidad?

Maruxa Baliñas: Sí, claramente faltan mujeres en el mundo de la música, pero también es cierto que la invisibilidad la crean los propios medios que producen la visibilidad. Hay mujeres pero se habla poco de ellas, o se hace con condescendencia. Las propias mujeres desconfían a veces de sí mismas: cuando a una mujer le encargan algo –y suelen ser varones quienes lo hacen- creo que es automático pensar ¿por qué me lo piden a mí? ¿soy una cuota o creen en lo que hago?

8. R.P: ¿Se ha sentido desplazada o sin espacio, sin lugar por ser mujer?

Maruxa Baliñas: Como ya comenté antes, yo he tenido muy pocos problemas en mi actividad por ser mujer, pero es que mi situación es especial. Como copropietaria y directora de mundoclasico.com, yo tengo una libertad que no es en absoluto habitual y que veo a menudo como un privilegio. En otros aspectos de mi vida sí he tenido la sensación de ser considerada menos que un hombre, pero como periodista musical, la verdad es que no.

9. R.P.: Hay una cultura machista muy de nuestro país, tan propiciada en la educación y en el ambiente que nos rodea y a veces cuesta que se reconozca y que se neutralice ¿Cómo luchar contra esta lacra?

Maruxa Baliñas: Siempre dicen que es una cuestión de educación y para muchísima gente eso significa el colegio. Pero yo como profesora veo que tenemos poca influencia en los niños y adolescentes, sobre todo porque sus referencias son otras. Los padres son los que más influyen, porque es lo que viven en sus casas lo que más les va a servir de referencia a la hora de entablar sus relaciones. Pero sobre todo el problema es la cultura de los mass media y especialmente los contenidos de internet. El mundo digital para ellos es muy real y lo que ven allí es en general deplorable: contenidos breves y superficiales, una cultura de la imagen manipulada, de la realidad disfrazada, del chiste, la anécdota y la ocurrencia. Pero eso no les facilita nada la vida cotidiana, donde las cosas son lentas, aburridas, llevan tiempo y requieren esfuerzo. Y el machismo en internet es una cosa exageradísima, los adultos nos lo tomamos como un chiste o algo simplemente que borramos o no percibimos porque no encaja con nuestra vida o valores. Desgraciadamente, para estos nativos digitales lo que allí viven es real y los padres a veces están tan ausentes que no se enteran de lo que ven sus hijos y sobre todo cómo lo entienden.

10. R.P.: ¿Qué cambiaría como mujer en esta sociedad que nos ha tocado vivir? , ¿y qué como musicóloga?

Maruxa Baliñas: Como mujer, añoro una sociedad con otros valores más humanos, más centrados en la persona, más espirituales o sociales, más solidarios. Como musicóloga, creo que estamos en el buen camino y es sólo cuestión de tiempo que haya más mujeres en puestos de responsabilidad, más catedráticas en la universidad, más investigadoras en los centros. O sea, la mentalidad ya ha cambiado en buena medida, ahora falta tiempo para que se asienten estos cambios, para que sean más cotidianos, para que ninguna musicóloga tenga que ver cortada su carrera por obligaciones familiares que no sean compartidas en igual medida por sus parejas.

11. R.P.: ¿Qué piensa de la brecha salarial?

Maruxa Baliñas: Esta es una pregunta fácil de responder: tardé en descubrir que existían diferencias de salario entre hombres y mujeres, de hecho, ya era bastante mayor cuando me enteré y me quedé alucinada. Sigo sin entenderlo y sobre todo sin entender por qué no se prohíbe y persigue, incluso legalmente, como se haría si alguien -a igual trabajo y responsabilidad- pretendiera pagar menos a los homosexuales o a los bajitos.

 
"Porque no es sólo que se pague menos a las mujeres por un mismo trabajo, sino que las mujeres suelen ocupar puestos peores y peor pagados."









12. R.P.: ¿Qué piensa de las cuotas, se debe/puede programar solo atendiendo al género?

Maruxa Baliñas: No me gustan las cuotas, pero tal como está la situación, y las dificultades que siguen encontrando las mujeres, creo que debe realizarse una ‘discriminación positiva’, deseando y trabajando para que llegue un momento en que no sean necesarias estas cuotas porque a la gente ya no se le juzgue por su sexo.
A veces tampoco es cuestión de cuotas, simplemente que si la persona o el comité encargado de una programación es exclusivamente masculino, sus criterios van a estar sesgados. O sea, a menudo no es necesario establecer una cuota femenina en –por ejemplo- el número de compositoras programadas, sino simplemente que si en el comité de selección hay mujeres, automáticamente se selecciona a mujeres. Esto se está notando muchísimo.
Mirando por ejemplo el Teatro Real, el Consejo Asesor del teatro está compuesto por Mario Vargas Llosa, trece hombres y ocho mujeres, lo cual no está tan mal; pero lo que es la Dirección general y Artística consta de once hombres y una mujer (la directora de Publicaciones); y en el caso de la Junta de Protectores, como es algo vinculado al cargo que ocupan, normalmente en empresas patrocinadoras, hay setenta y ocho hombres y cuatro mujeres.

13. R.P.: ¿cuáles deberían ser los criterios de selección?

Maruxa Baliñas: Los mismos que para cualquier selección, principalmente el valor de la creación y la repercusión social del proyecto. O sea, los programadores tienen que poder justificar el uso que están haciendo del dinero –que normalmente no les pertenece- y en esa justificación tienen que entrar criterios económicos pero también la repercusión social, el bien a la sociedad que se va a repercutir. En ese sentido, el encargo a una mujer tiene un valor social añadido por la discriminación que las mujeres sufren como creadoras y que hay que reducir.

14. R.P.: A veces me encuentro con programaciones que obedecen más a criterios de cuotas mal entendidas que a un valor real de las obras programadas, ¿qué piensa de esto?

Maruxa Baliñas: Creo que así no se soluciona nada. Como en el caso del feminismo en general, que las cosas empezaron a transformarse realmente cuando se vio que todos salían ganando con los cambios, también tiene que notarse que la programación de un teatro o sala de conciertos es mejor cuando participan hombres y mujeres. Lógicamente este es un camino lento, porque tanto el repertorio de conciertos como el operístico están formados casi exclusivamente por compositores varones y eso va a tardar mucho en solventarse. Pero a veces no se trata de que el compositor sea hombre o mujer, sino del planteamiento que se quiera trasmitir. O sea, no podemos inventarnos compositoras de ópera del siglo XVIII comparables a Mozart, pero sí que la dirección de escena o la dirección musical sean femeninas, y eso cambia ya mucho las cosas.

15. R.P.: ¿Es usted feminista? ¿por qué?

Maruxa Baliñas: Sí, me considero feminista. Por un doble motivo: soy mujer y veo las cosas como mujer; pero además soy persona y quiero un mundo justo e igual para todos, independientemente de cuestiones de género.

16. R.P.: ¿Podría decirme algunas de sus compositoras favoritas?

Maruxa Baliñas: Lo de compositores o compositoras favoritas es una pregunta que siempre me cuesta mucho contestar, porque tengo gustos bastante variados, y me gusta desde la música medieval hasta la de ahora mismo. De las actuales, me gusta mucho Gubaidulina y era fan de Pauline Oliveros, entre las jóvenes Lera Auerbach y Elena Rykova, de las españolas Inmaculada Pérez Frutos. Del XIX soy más fan de Fanny Mendelssohn que de Clara Schumann, pero escucho a ambas. Saariaho es una gran compositora pero me llega menos, y nunca me entiendo con Hildegarda von Bingen, un clásico siempre que se habla de compositoras. Me gustan las compositoras-pianistas de la Belle Époque como Chaminade. Hay muchas opciones, depende.

17. R.P.: ¿Podría decirme algunas de sus cantantes o intérpretes favoritas?

Maruxa Baliñas: En intérpretes en cambio las referencias son ya mucho más amplias que en la composición musical. No tengo clara mi pianista actual favorita, creo que en este momento mis ídolos son pianistas varones, pero en diferentes momentos  he estado colgada de Pires, de Argerich, de Ingrid Haebler (a quien vi en directo cuando era joven y me encandiló), de María Yudina (por eso ahora admiro tanto a Sokolov), de Uchida y muchas más. En España me encanta Joaquín Achúcarro, pero sólo porque ya no puedo disfrutar de Rosa Sabater y Alicia de Larrocha. Entre las actuales, estoy esperando a que ‘maduren’ un poco más Buniatishvilli (la escuché anteayer), Gabriela Montero o por ejemplo Yuja Wang, que me parece más interesante que los dos sempiternos contendientes en el pianismo chino, Yundi Lee y Lang Lang

18. R.P.: Si fuera Ministra de Cultura, de Igualdad… ¿qué medida tomaría inmediatamente?

Maruxa Baliñas: Como Ministra de Igualdad: fin de la brecha salarial; mejora de las ayudas sociales y económicas a madres y padres con hijos pequeños, y sobre todo con ancianos dependientes, de modo que ninguna mujer se vea obligada a renunciar a su vida ‘exterior’, a sus proyectos, por las responsabilidades familiares.
Como Ministra de Cultura, analizar muy seriamente la cultura que se hace, cómo se hace y para qué se hace; y qué son costumbres obsoletas y qué son valores a conservar en nuestro concepto de cultura. Pero sobre todo perder el miedo a la libertad femenina, a los cambios que pueden significar. Convencerse y convencer a los demás de que nuestra cultura puede ser mucho más rica, pero sobre todo mucho más satisfactoria y liberadora, cuando en ella participen más de los que ahora lo hacen. 

19. R.P.: ¿Cuáles son sus próximos proyectos?

Maruxa Baliñas: En este momento, muchos de mis proyectos son más personales, interiores, que exteriores. Cumplir los cincuenta me está sentando bien, me siento más libre y tengo ganas de hacer cosas que antes me dieron miedo o vergüenza.
Como musicóloga tengo ganas de investigar, pero sobre todo publicar más sobre música hecha en Galicia. Como directora de mundoclasico.com, quiero ‘leer los tiempos’, tengo a veces la sensación de que miro demasiado al pasado, a lo que ya viví y los músicos que escuché, incluso de un modo añorante, y que se me escapan cosas actuales, qué música se está haciendo y por qué, cuáles deben ser mis criterios de valor cuando hago una reseña o analizo un acontecimiento musical.
Uniendo ambos aspectos, sigo buscando el misterio de la música, por qué es tan atractiva y tan significativa para mí y para tantas personas. Citando a Kaija Saariaho en su discurso madrileño hace unas semanas: “la música nos entra sin palabras, a veces muy profunda e inesperadamente, como un olor, revelándonos nuevos significados de nosotros mismos […] Nos olvidamos de nosotros mismos para saber de los demás y descubrir otras maneras de percibir el mundo que nos rodea: una de las cosas importantes que sólo el arte puede darnos a todos con su nueva e inesperada mezcla de pensamientos y sensaciones, y que nos ayuda a crecer como seres humanos y a comunicarnos con otros […] Dejar que la música siga enriqueciendo la vida de la gente significa dar espacio y reconocimiento al trabajo artístico profundo y honesto, que es irremplazable”.


 



Maruxa Baliñas
Comenzó a escribir en Mundoclasico.com el viernes, 1 de mayo de 1998. En estos 20 años ha escrito 682 artículos. Maruxa Baliñas es desde el 5 de febrero de 2007 la directora de 'Mundoclasico.com' en sustitución de Luisa del Rosario, que dirigió la publicación durante sus primeros diez años de vida.

Maruxa Baliñas nació en Santiago de Compostela. Estudió Historia del Arte (especialidad de Arte Moderno y Contemporáneo) en la universidad de Santiago de Compostela y Musicología en la Universidad de Oviedo. Además estudió piano en el Conservatorio de Santiago y en el Instituto de Cultura Rusa de San Petersburgo. Como musicóloga, su campo de investigación preferente es el cuplé en España, pero también ha publicado artículos sobre la vida musical en Santiago, la música en el cine mudo y actualmente investiga sobre Les Ballets Suédois.
Maruxa Baliñas ha colaborado en Mundoclasico.com desde 1999, y ha sido editora adjunta desde 2001 hasta 2004 y jefa de redacción desde esa fecha. 


La foto de Maruxa es cortesía de la musicóloga.





 

Biblioteca

Destacamos ...

 
Nueva Sección Sub35
dedicada a la promoción de jóvenes compositores y compositoras 

 
Nueva Sección Directorio
dedicada a la promoción de compositores, intérpretes, instituciones y editoriales.

Este trabajo tiene la licencia CC BY-NC-SA 4.0