Duodécima entrevista de la serie «Nuevos tiempos, nuevas músicas» con la compositora Alicia Morote. Hemos hablado con ella y esto es lo que nos ha contado.

1. Ruth Prieto: ¿Dónde estaba y qué estaba haciendo justo antes del confinamiento? 

Alicia Morote: Estaba en Murcia, mi ciudad natal y donde vivo actualmente. Estaba haciendo mi vida normal, trabajando en proyectos como compositora - el trabajo de la composición siempre es desde casa -. Estoy centrada en la composición para medios audiovisuales, y en ese momento estaba componiendo la música para un corto y orquestando música para una película. Ya habían cerrado el Centro Superior Música Creativa, donde doy clases en Madrid (andaba viajando cada semana para dar mis clases de Instrumentación y Orquestación) y ahí comenzó toda la incertidumbre. Vivo muy enfrascada en mi “mundo” y de repente me di cuenta de que todo parecía tambalearse; la gente empezó a dejar de salir a la calle y a dejar de frecuentar los lugares donde en esta ciudad he encontrado mis espacios propios; cafés, bibliotecas. Ahí dije… Esto es muy gordo.
 
2. R.P.: Venimos de una situación de confinamiento muy larga y complicada, ¿cómo ha vivido usted toda esta situación?
 
Alicia Morote: Me imagino que como muchas personas. Al principio es la “novedad”; a pesar de todo el drama acontecido, si no tienes casos cercanos con la enfermedad, lo vives como una especie de festividad; que si los aplausos de las ocho, las videollamadas, la sensación de unión colectiva. Pero, por momentos, era como si me sintiera ínfima en este mundo, pues algo muy por encima de nosotros rige nuestras vidas individuales. Creemos que nunca nos va a pasar nada malo; creemos que no nos va a suceder a nosotros, pero de repente ocurre algo que nos toca directamente y no tenemos herramientas para digerirlo.

 








A título personal, al principio me vino muy bien encerrarme para obligarme a parar un poco. Sin embargo, al final da igual que te encierres, te vayas a la India o qué sé yo. Si tienes un carácter ansioso y nervioso, eso va a seguir ahí hasta que tomes medidas serias para cambiar esto. El primer mes y medio lo llevé bien, pero de nuevo me sobrevino la inquietud acerca del presente y el futuro global e individual. Me cuesta mucho no vivir en alerta.
 
3. R.P.: Hemos pasado una situación de desescalada, de una cierta incertidumbre, y ahora ya estamos en lo que se ha venido a llamar la nueva normalidad ¿pero en qué momento se encuentra usted ahora?
 
Alicia Morote: Realmente sé que todo esto me ha cambiado en algo, pero aún no sé muy bien en qué. Todo esto me ha hecho pensar mucho, pero aún no he llegado a conclusiones muy concretas. Lo que sé es que he salido del confinamiento con pocas energías. Hay quien seguro ha cogido fuerzas; sin embargo yo necesitaba recuperar mi vida normal para reubicarme.
Uno de mis pensamientos durante el confinamiento era el de “si todo está parado, ¿para qué seguir trabajando? ¿Para qué seguir creando, si no puede haber conciertos? ¿Los habrá de nuevo algún día?”. Aún me sobreviene este pensamiento negativo a veces, pero no tengo una respuesta, así que sólo sé que hay que seguir y vivir al día.
 
4. R.P.: ¿Cómo ve el futuro de la cultura en general y en concreto de las artes escénicas presenciales?
 
Alicia Morote: Me cuesta creer que todo vuelva a ser como era. Las medidas de seguridad obligan a limitar el acceso a espacios culturales, y la organización de ciertos eventos, como obras de teatro, festivales de música y conciertos, directamente en algunos casos no merece la pena llevarlos a cabo o no salen rentables. Van a tener que idearse alternativas; pero sinceramente, aún no sé de qué tipo. Gran parte de la vida del arte depende de la presencia, de la interacción entre el espectador con la obra así como con otros espectadores: la experiencia compartida. No es igual contemplar un museo o ver una obra de teatro a través de una pantalla, pues la esencia se pierde…
Las nuevas propuestas que surjan en esta nueva etapa habrán de ser lo suficientemente potentes como para que merezca la pena dedicarles tiempo y dinero del bolsillo.
 
5. R.P.: Se habla mucho de ‘volver’ a la normalidad, pero antes, ¿estaba todo tan bien?, ¿deberíamos volver a cómo estábamos? ¿reinventarnos?... ¿cómo?
 
Alicia Morote: En mi opinión, deberíamos de buscar un modelo por el cual se eduque a la sociedad a ser más responsable con el medio y a ser más autosuficientes a la hora de abastecernos, sin perder las ventajas que nos proporcionan los avances en tecnología y comunicaciones… Pero claro, estoy hablando de un ideal. Seguramente lo que ocurrirá es que volveremos a lo de antes como si nada.

Creo también que todo esto nos debería de empujar a hacer balance sobre la vida antes y la vida que queremos. La vida de repente parece no brillar tanto como antes, pero ¿qué teníamos antes? Ya nada parece sorprendernos, y es que vivimos completamente adormecidos; algo así como anestesiados.
 
6. R.P.: ¿Qué eliminaría usted de cómo estaban las cosas antes y qué añadiría usted?
 
Alicia Morote: Quitaría todo ese humo en que nos vemos envueltos de sobreinformación y los ritmos de vida incesantes que hacen que las horas pasen como si fueran minutos, y añadiría más tranquilidad y tiempo para la reflexión.
 
7. R.P.: En concreto en el mundo de la música, de los conciertos: ¿cómo ha cambiado su visión como creador?, ¿cómo piensas que esta pandemia va a cambiar la realidad de los compositores e intérpretes?
 
Alicia Morote: Como creadores, debemos de tratar de aprovechar toda esta ola de cambios para reflejarlos de alguna forma en nuestra manera de hacer la música. Todo esto hay que utilizarlo para tratar de enviar algún tipo de mensaje y plasmar nuestra vivencia dentro de ello. Pienso también que deberíamos de tomarnos este cambio como una mirada al futuro y agarrarlo con ganas e ilusión para hacer cosas muy potentes y marcar un nuevo periodo.
 
8. R.P.: Parece mentira que a estas alturas tengamos que estar hablando de esto pero, ¿por qué la música y la cultura es importante para la sociedad?
 
Alicia Morote: La cultura nos pone los pies en la Tierra. Nos devuelve a nuestro origen, a aquello que nos mueve a seguir queriendo vivir, respirar, caminar, comer… El arte es algo que funciona de una forma tan elemental como es la excitación de nuestros sentidos, pero que nos ayuda a acordarnos de que estamos aquí un segundo y de que no somos tan importantes, pero tampoco tan independientes de lo que nos rodea.
En definitiva, el arte es necesario porque nos conecta con el hecho de que somos seres humanos, y esto es algo mucho más tangible, elemental y natural de lo que se cree que es el arte.
 
9. R.P.: ¿Por qué se infravalora tantas veces la cultura, el trabajo del artista…?
 
Alicia Morote: El arte es mirado por encima del hombro; es colocado en museos o conciertos para deleitar en una tarde de aburrimiento, pero creo que no hay un interés por parte del espectador en conectar con la obra ni tratar de mirar más allá de ella. Por tanto, todo es humo y entretenimiento, y claro, todo lo que sea entretenido está bien, pero siempre va a estar por debajo de lo que se considera esencial. Aún hay a quienes les cuesta creer que haya personas que vivan (o pretendan vivir) del arte, como si fuera una pérdida de tiempo o una amenaza para el sistema económico.
 
10. R.P.: ¿Qué papel van a jugar las plataformas digitales, el streaming, la tecnología ahora mismo tras el confinamiento? ¿tendrán utilidad estas herramientas tecnológicas en el futuro cercano y cuando la pandemia acabe?
 
Alicia Morote: El papel de las plataformas digitales durante el confinamiento ha sido de gran importancia, pues estas han permitido que la cultura se mantenga viva, dando ánimos y esperanza a muchas personas. Todo esto va a seguir y se va a ampliar y a profundizar sobre formas de sacarle partido, pero… No deja de tratarse de estar en casa frente a una pantalla y, sinceramente, espero que sean un simple complemento para la vida “real” que conocemos.
 
11. R.P.: ¿Saldremos de todo esto mejores?, ¿qué ha aprendido usted en todo esto?
 
Alicia Morote: Seguramente saldremos cambiados. Esto que hemos vivido es histórico y, como mencionaba antes, hemos vivido tan cómodamente hasta ahora que algo así nos pilla muy desprevenidos. No sé si estamos preparados para aceptar que no siempre las cosas van a ser como esperábamos, así que posiblemente volvamos de nuevo a ese bucle en el que vivíamos.
Por mi parte, estoy aprendiendo a pensar más en el momento y menos a largo plazo. Toda esta situación me enseña que es mejor preocuparse del momento presente por encima del “qué va a pasar”.
 
12. R.P.: Avances tecnológicos, comunicación… ¿cómo se imagina los conciertos del futuro?, ¿habrá cambios en la experiencia artística?, ¿en los conciertos?…
 
Alicia Morote: “Los conciertos del futuro” es un término que suena muy bien, siempre y cuando tengan lugar en un espacio destinado a ello, como hasta ahora, y no desde casa frente al ordenador. La tecnología puede dar una dimensión muy diferente en muchos sentidos a una experiencia tan única y especial como es un concierto, y eso es algo que se puede aprovechar muy bien para hacer de ello algo grandioso.
 

 





13. R.P.: ¿Qué espacio tiene la música de vanguardia en la nueva normalidad, en los futuros conciertos?
 
Alicia Morote: La música de vanguardia tiene su espacio propio y, en mi opinión, lo ideal (y esto va entroncando con mi respuesta a la pregunta anterior) es que los compositores exploren en formas de reinventar la experiencia de los conciertos en directo para convertirlos en algo intenso, bello y profundo que recordar. Para ello, hay que pensar a gran escala. Debemos de ser más ambiciosos.
 
14. R.P.: ¿Cuál es el futuro de las artes presenciales?
 
Alicia Morote: No sé qué va a pasar. Pero… Ojalá que sigan ahí, y con más fuerza que nunca. Ojalá que algún día se acabe de comprender totalmente que el arte hace que la vida cobre sentido más allá del comer y el vestirse.
 
15. R.P.: Un pensamiento sugerencia para la situación actual ….
 
Alicia Morote: Que dejemos de vivir como zombies, y que seamos partícipes al 100% de lo que acontece en nuestras vidas: que nos pongamos en activo y seamos más conscientes.



La fotografía de Alicia es de Israel Sánchez y ha sido facilitada por la compositora.

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