1. Ruth Prieto: Hace tres años se publicó el proyecto
Spanish Dances, y ahora sale al mercado su segundo trabajo discográfico:
Música Callada, ¿cómo ha sido la génesis de este segundo proyecto?
Diego Ramos: La idea primigenia surge del deseo de ir dejando constancia en forma de disco del repertorio con el que me siento más identificado, tanto a nivel personal como pianístico, y que he ido trabajando a lo largo de años. La música de Federico Mompou me ha acompañado durante mucho tiempo, en especial su
“Música Callada”, que además tuve la inmensa fortuna de estudiar con Carmen Bravo, viuda del compositor, en mi etapa formativa en la Academia Marshall en Barcelona. Así que, la
“Música Callada” era una obra que desde el inicio de este proyecto tenía en mente que llevaría al disco.
2. R.P: Este año quedará marcado por la pandemia de coronavirus. El confinamiento ha sido largo y complicado y ha afectado mucho a la situación de los intérpretes. ¿Qué balance hace de este 2020?
Diego Ramos: El 2020 ha sido, y aún este 2021 lo está siendo…, un año horrible. En primer lugar por gran la cantidad de vidas humanas que se han perdido a causa de esta pandemia. Vivimos momentos en los que nos hemos acostumbrado a las cifras de fallecimientos como si se estuviera hablando de alguna otra cuestión y eso es absolutamente desolador… Después, por las personas que han perdido o perderán sus empleos, y que están ya en situaciones económicas muy difíciles. Realmente el panorama de nuestro país y del mundo de general es desalentador.
La situación en el mundo de la cultura y de los intérpretes en particular no es más alentadora. La suspensión constante de conciertos y todo tipo de eventos culturales está siendo muy dura para todos. La cultura es uno de los sectores que está resultando más perjudicados por la pandemia y por otra parte, paradójicamente a esta afirmación, el confinamiento ha vuelto a poner de relieve la enorme importancia que tiene la cultura para el ser humano.
3. R.P: ¿Cómo ha sido grabar en un año tan complicado?
Diego Ramos: Realmente este disco está grabado antes de que comenzara toda esta pesadilla. Lo grabé el último fin de semana del mes de noviembre de 2019. Y la idea, en principio, era que hubiera salido al mercado alrededor del mes de marzo o abril de 2020, justo cuando estábamos inmersos en el confinamiento domiciliario. Así que, conjuntamente con la discográfica
Orpheus Classical, decidimos que lo más sensato era esperar un poco ante la situación de incertidumbre que vivíamos aquellos días y publicar el disco más adelante.
4. R.P: ¿Cómo ha sido su proceso creativo para abordar esta
Música Callada?
Diego Ramos: Como comenté al inicio de nuestra conversación, la
Música Callada ha formado parte de mi repertorio desde hace años. Por tanto, el proceso creativo comienza a raíz de estudiar esta obra con el objetivo de trabajarla con Carmen Bravo, Alicia de Larrocha y Carlota Garriga. Después de esta impagable experiencia se abre un proceso, habitual en mi forma de tocar, de dejar reposar el repertorio durante un tiempo para volver a él más adelante con otra mirada, intentado profundizar desde otro momento, desde otro punto de vista. Por otro lado, el trabajo de escucha y estudio de las grabaciones que el propio Mompou dejó de su obra, incluida la
Música Callada, aportó (y lo sigue haciendo) una visión muy importante para mí, ¡claro! Y, en combinación con lo anterior, no puede faltar en mi caso la experiencia de tocarlo en concierto porque creo que esta experiencia de interpretarlo en directo retroalimenta y fortalece el proceso creativo. También desatacaría por último, leer sobre su vida, su obra y estudiar otras piezas, también me ha ayudado a entrar más en el universo creativo del compositor.
5. R.P: ¿Qué le inspira como artista y por qué?
Diego Ramos: Posiblemente, lo que más me inspire como músico sea la Música, aunque parezca muy obvio señalarlo. Y no sólo, ni mucho menos, el repertorio pianístico. Entre los pianistas que me inspiran profundamente destacaría a artistas como Alicia de Larrocha, Horowitz, Esteban Sánchez, Pires o Gilels.
También es muy importante para míi la Naturaleza, sobre todo la ornitología, la fotografía, la literatura. En fin, la cultura en general.
En el plano más personal, cualquier experiencia que nos marque de algún modo creo que también es indisoluble a nuestra forma tocar.
8. R.P: La
Música Callada de Mompou se ha grabado numerosas veces, ¿qué quiere usted aportar con su versión?
Diego Ramos: La
Música Callada es una gran obra para piano y esto ha llamado la atención de muchos pianistas, como pasa con el repertorio más tradicional del que hay innumerables grabaciones disponibles en el mercado, como todos sabemos.
Con humildad, aporto mi visión de esta obra, desde mis vivencias personales con ella a mis conocimientos del texto y de la música de Mompou. Lo demás quedaría a juicio de la crítica y del público.
9. R.P: ¿Cuáles son sus criterios a la hora de escoger músicas y compositores?
Diego Ramos: Trabajo desde la emoción y con esto quiero decir que no estudio un repertorio que no me llene totalmente. En este sentido, tengo la suerte de trabajar aquello que es importante para mi tanto en lo personal como en lo musical.
10. R.P: ¿Habrá tercer CD?
Diego Ramos: Si, ¡espero! Al menos ese es mi deseo…
11. R.P: ¿Cuáles son sus próximos proyectos?
Diego Ramos: Mi proyecto más inmediato es seguir trabajando en el repertorio español de compositores que aún no he trabajado en profundidad y, sobre todo, la música de compositores actuales con los que ya estoy colaborando. Es un verdadero lujo para mí como intérprete poder trabajar una obra determinada codo con codo con el compositor que la ha creado. Y es muy probable que mi siguiente trabajo discográfico vaya en este sentido.
Las fotografías de Diego son de Moises Fernández Acosta y han sido facilitadas amablemente por el propio compositor y han sido facilitadas amablemente por el propio compositor para acompañar esta entrevista.