El objeto que hoy tenemos en nuestras manos es el fruto feliz de una milagrosa gestación.
Es este CD, en primer lugar, un regalo de cumpleaños para el genial Alfred Brendel, pero es también, sin ningún lugar a dudas, el precioso obsequio que el propio dedicatario nos hace a todos nosotros: músicos, amigos, aficionados o curiosos.
Todo comenzó con un encuentro en el Wissenschaftskolleg de Berlín (Instituto de Estudios Avanzados) a principios del mes de marzo de 2011. No sería exagerado decir que casi se me saltan las lágrimas al ver entrar al comedor del ‘Wiko’, donde yo me encontraba durante el curso académico 2011/12 como Compositor en residencia, al gran pianista austríaco. Yo le observaba desde una mesa cercana con cierta turbación, cuando de pronto su encantadora compañera, la signora Majno, se acerca a mi mesa con elegante simpatía y me dice que ‘Alfred’ tendría mucho gusto en conocernos a mi esposa Gemma, a nuestro hijo Mauri y a mí. Así concertamos nuestra primera cita para comer juntos uno de los días siguientes. (Los residentes en la Institución tienen la obligación de compartir almuerzo de lunes a jueves durante el periodo que dure su estancia. De modo que yo tendría la enorme fortuna de ver al maestro Brendel casi todos los días durante los tres meses que durase su estadía en Grunewald). No hay palabras para describir la generosidad y el cariño que siempre nos mostraron los Brendel. El regalo de estas deliciosas reuniones, por supuesto también en compañía de otros residentes, se fue repitiendo con creciente frecuencia. Empezamos también a visitar juntos algunos de los conciertos más interesantes que nos ofrecía la ciudad, así como a salir a cenar fuera de los muros de nuestro retiro.
Por entonces, había comenzado yo a estudiar en profundidad la Sonata en Si menor de Franz Liszt sabiendo, claro está, que esta obra es una de las cumbres interpretativas de Alfred Brendel. Empezó así a generarse el eje gravitatorio de nuestras conversaciones musicales. Paralelamente, iba germinando en mi interior la idea y la necesidad de escribir una obra basada en estas conversaciones con Brendel. Tal obra sería, a su vez, un homenaje al admirado pianista y, ahora, amigo. Un día le comenté a Maria Majno que soñaba con una obra para piano dedicada a Alfred, pero que mi proyecto era todavía un secreto —ancora un segreto. Ella, sonriente, invirtió el orden cambiando la expresión: un segreto, ancora (un secreto más…) Siendo todavía un secreto, le conté la anécdota a nuestro común amigo Peter-Paul Kainrath, quien entusiasmado convino en convertir el episodio en una realidad sonora y, tras algunas consultas administrativas, llegaba poco después el encargo oficial para una obra destinada al prestigioso Concorso Busoni. La nueva composición habría de estrenarse en el Festival Busoni de Bolzano. Alfred Brendel impartiría una lección magistral sobre la Sonata de Liszt, señalando ésta música también como una puerta a la modernidad –en referencia a mi nueva creación–, y dos pianistas interpretarían las dos obras, la Sonata de Liszt en primer lugar y, después, la nueva partitura de Sotelo. Como intérprete de Liszt se pensó en el pianista canadiense Louis Lortie, quien el año 1984 había ganado el Primer Premio del Concorso Busoni, precisamente con una inolvidable interpretación de la Sonata in si menor de Liszt. Para el estreno de mi obra, propuse con verdadero fervor el nombre de nuestro gran pianista Juan Carlos Garvayo, un profundo conocedor, además, de mi música y mi pensamiento musical. Del encuentro entre Garvayo y Brendel, primero en Bolzano y luego en Madrid, Arezzo y Londres, ha nacido una hermosa amistad y una fascinante complicidad intelectual de la que soy feliz testigo y de la que el presente ‘objeto’ da cumplido testimonio.
El estreno de nuestro proyecto tuvo lugar finalmente el 25 de agosto de 2014 en el marco del citado Festival Busoni de Bolzano.
En el presente CD escuchamos, en primer lugar, la lección magistral de Alfred Brendel, grabada en su residencia de Londres el día 12 de abril de 2016 por Francisco Moya, en compañía de Juan Carlos Garvayo cumpliendo funciones de productor; en segundo lugar, la Sonata en si menor de Franz Liszt, en la histórica grabación de Brendel del año 1958 para el sello VOX; y en último lugar, el registro de mi obra Ancora un segreto, Hommage-Sonate per Alfred Brendel, realizado el 21 de diciembre de 2015 en el Auditorio Manuel de Falla de Granada por Juan Carlos Garvayo. Grabación en la que colaboré con mis indicaciones musicales y la más aguda y crítica escucha posible, durante la intensa e infatigable sesión que brindó nuestro pianista granadino.
Sobre mi propia obra podemos decir que recorre el paisaje sonoro de la obra de Liszt, por lo que existe una cierta analogía formal, así como una proximidad referencial a los materiales temáticos de la Sonata en si menor. Así, por ejemplo, el ‘Fugato’ –Allegro energico– del compás 160, encuentra su paralelismo en nuestra obra (compás 138 y ss.) en la forma de un canon en mosaico a 6 voces sobre la escala extendida ascendente y descendente derivada de los dos modos iniciales de la Sonata. Por otra parte señalar, que de estas notas inaugurales se extrae así mismo el material que va a generar una propia armonía ‘espectral’ (acordes por adición de frecuencias). Concepto armónico este que se extiende, como un universo en continua expansión, a lo largo de toda la arquitectura de la obra. No se huye tampoco en ningún momento de elementos característicos del pianismo lisztiano, como son las octavas y que resultan ser uno de los momentos de mayor virtuosismo y dificultad técnica para el intérprete (compases 250 a 264). Apunta de todos modos Alfred Brendel, no sin cierto tono de humor, que nuestra obra sobrepasa la dificultad técnica de su ‘modelo’ y no solo por las mencionadas octavas.
Finalmente señalar que, fruto del profundo análisis de la obra de Liszt, la malla que sustenta nuestra partitura está tejida por un complejo entramado de proporciones numero-simbólicas, entre las que cabría resaltar la función central de la nota SOL (G, en alemán) –presente en el misterioso inicio de la Sonata–, así como el peso de los números 3, 7 ó 9.
A pesar de las muchas referencias y alusiones, solo hay en nuestra obra una cita, digamos quasi literal (compás 265 y ss.), y es un pasaje que el propio Brendel considera uno de los más apasionantes acontecimientos sonoros de la sonata del compositor húngaro. Nos referimos a la transición sobre la nota pedal ‘La’ (compases 81 a 104), que precede a la primera aparición del Grandioso. Este pasaje simboliza el sello de nuestro hondo homenaje a Alfred Brendel.
Mauricio Sotelo
Notas de Alfred Brendel ...
When a few years ago I met Mauricio Sotelo, he was just about to familiarize himself with Liszt's Sonata. This not only led to a friendship but also induced the idea of writing a work that would relate both to the Sonata and to our encounter.
In the last decades, a number of musical works have emerged that are composed interpretations of older ones. We can regard them as a counter-position to historicising performances that have established themselves in many concert halls. According to Hans Zender, himself a contributor to this new species, the composer "is creator. But he is these days also an interpreter of the past to which he relates - whether seeking to surmount it, or to carry on." Sotelo's work is a confrontation of this kind, an argument dealing with the shape and the material of Liszt's Sonata that has resulted in something personal and spectacular.
Alfred Brendel